Señor director:
Si bien es cierto que la pobreza ha existido siempre en nuestro país, no lo es menos que los gobiernos se han preocupado poco por cambiar la situación.
Cada vez que visito alguna región, regreso a la Capital apenada por las condiciones infrahumanas en que vive mucha gente.
En los pueblos más remotos de la República, y hasta en otros no tan lejanos de los grandes centros urbanos, falta mucho por hacer.
Escuelas desvencijadas, ausencia total de planes de salud e infraestructuras para la atención médica, inexistencia de sistemas de agua potable y sanitaria, y un largo etcétera.
Los organismos oficiales deben atender esas prioridades.
Atentamente,
Ivelisse Peña M.