Señor director:
Se ha hecho costumbre en la ciudad la ocupación de las aceras, espacios destinados a los peatones.

He leído con interés en días recientes las quejas y observaciones hechas por lectores de Hoy acerca de este asunto.

Si existen disposiciones municipales que regulen el uso de los espacios urbanos, los Ayuntamientos deberían aplicarlas con toda rigurosidad.

No es posible que constructores o maestros que dirigen grandes obras en las urbanizaciones de clase media continúen lanzando todo tipo de materiales y desperdicios a las aceras, sin ninguna restricción.

Las disposiciones legales se dictan para hacerlas cumplir, no para engavetarlas.

Atentamente,

Persio del Rosario

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LAMENTA
Casos de feminicidios

Señor director:

La sociedad dominicana ha tenido que soportar, durante muchos años, las agresiones físicas a la mujer.

No hay día en que no se conozcan a través de los medios crímenes contra las féminas.

Y lo penoso es que muchos casos no se divulgan, como tampoco llegan a los estamentos judiciales, por temor a los agresores.

Ninguna persona tiene el derecho de quitar la vida a su semejante.

Las instituciones responsables deben acrecentar sus esfuerzos para educar a los hombres y mujeres en el manejo de las desavenencias de pareja.

Al parecer, lo que se está haciendo desde esos organismos es insuficiente para frenar estos bochornosos y lamentables episodios.

Atentamente,

Tirsa A. Sepúlveda