Señor director:
Las deficiencias que arrastran los estudiantes dominicanos, desde el nivel básico, es desesperante.

Con esas lagunas llegan a las universidades, y se gradúan en cualquier carrera.

Por tales razones, tenemos el país lleno de ‘profesionales’ con enormes vacíos en lengua española, y hasta con desconocimientos sobre historia y geografía.

Es una lástima que la escuela no haya corregido esas deficiencias en la formación del alumno, para que podamos tener mejores ciudadanos.

Hay que reforzar los planes de enseñanza, pero también exigir mayor capacidad a quienes instruyen.

El país necesita con urgencia maestros con verdadera vocación y entrega.

Atentamente,
Julia C. Martínez 

Destaca
Vocación por las artes en RD

Señor director:
Resulta alentador que muchos de nuestros niños y adolescentes se inclinen por los estudios de música y artes plásticas.

Las academias de pintura y musicales constituyen una ventana abierta para que esa población canalice su vocación.

Hemos visto que se abren concursos, patrocinados por instituciones y empresas, para estimular a los niños a plasmar sus inquietudes.

Ese es un elemento que debemos apreciar, en una sociedad que a veces parece caminar sin rumbo.

Si logramos que parte apreciable de nuestra población dedique unas horas a desarrollar sus talentos, habremos ganado mucho.

El Estado debe apoyar esos esfuerzos del sector privado.

Atentamente,
Aracelys N. Perdomo