El caos está lleno de luz (1era parte).

El caos está lleno de luz (1era parte).

Ser fuerte no significa hacer brotar músculos y flexión. Significa encontrarse con lo numinoso de uno sin huir, viviendo activamente con la naturaleza salvaje de una manera propia. Significa ser capaz de aprender, ser capaz de sostener lo que sabemos. Significa sostenerse y vivir.

Clarissa Pinkola Estés.

En la novela de Sherlock Holmes, el sagaz detective dice: «El mundo está repleto de cosas obvias de las que nadie se da nunca cuenta ni de casualidad». Hace algunos años, tuve un programa radial al que llamé “Despertando Conciencias” para agradar a mi pareja de aquel momento. En ese tiempo,él era amante del crecimiento, un buscador, y yo no estaba tan interesada en esos temas.

Cuando me preguntaban: ¿qué es la conciencia? me veía en serios aprietos. ¿Cómo explicaba que la idea del nombre fue de él?En ocasiones, un destello de luz iluminaba mis comprensiones acerca de la conciencia, y como un relámpago desaparecía,para dejarme sumida de nuevo en la oscuridad. Amedida que la experiencia se repetía, la idea de la conciencia se me aclaraba, pero aún era muy difícil comunicar mi visióna los demás.

Hoy día, la mayoría de personas que me conoce piensa que soy experta en buscar significados escondidos, en acontecimientos de apariencia banal. ¡El pasado fin de semana entré en el clímax del caos! La situación tuvo su origen a principios de diciembre, cuando las losetas de una habitación se levantaron, ¡y me anunciaron que había que cambiar el piso de todo el apartamento!Acababa de pintar, arreglar y poner la decoración navideña, así que tomé la decisión de no aguar mis fiestas y hacer el trabajo al iniciar el año.

El sábado, ¡el sonido de las mandarrias era ensordecedor! En medio de aquel desorden, y de la insolente nube de polvo que amenazaba con no dejar virgen ningún lugar, recibía los alentadores mensajes de mis amigos por whatsapp:“¡2014 con suelo nuevo y bello!”, “¡Están trasplantando tus raíces para que crezcas más!”, “Seguro que le encuentras sentido al caos, y lo aprovechas”. El génesis relata que en el inicio había caos y oscuridad.

El caos es energía potencial en desorden. Mis amigos sabían que si esta realidad se había manifestado, era porque yo la había creado. Yo también sabía que es así. Entonces, ¿Qué me mostraba el caos? Cuando miramos cualquier acontecimiento de este modo, se revela una cantidad de luz sorprendente. La luz revelada nos fortalece, y así recuperamos poder. Saber que hemos creado la realidad que vivimos nos da la autoridad de cambiarla.

El génesis nos muestra la autoridad de Dios sobre la creación: “El Señor dijo hágase la luz, y la luz se hizo. En mis talleres enseño que “tomar conciencia” de algo es tener la autoridad para cambiar los efectos que se han producido. En el libro de Juan vemos el resumen de todos los evangelios, y el sentido de la vida, muerte y resurrección de Jesús: “En (el) principio era el Verbo, y el Verbo era con Dios, y el Verbo era Dios. Este era en el principio con Dios. Todas las cosas por él fueron hechas» (Jn. 1:1-3).

Al hacerme la pregunta: ¿Qué palabras podrían ordenar mi desorden?, llegué a la comprensión de que la conciencia es la parte más esencial de nosotros. Es aquello que evoluciona, utilizando los cuerpos de energía para materializarse en forma de realidades.Por consecuencia, nuestras realidades muestran nuestro nivel de conciencia. Mientras algunas personas viven una realidad de abundancia, otras viven una realidad de carencia. Mientras algunas viven una experiencia de amor, otras viven el abandono.

Es obvio que la realidad no es igual para todos. Lo que experimentamos tiene relación con nuestra conciencia.La conciencia es un reflejo de nuestra relación con Dios. La conciencia es eso que somos en singular, según nuestra creencia del “yo soy”. Así, la conciencia se expresa por medio de lo que decimos de nosotros mismos.

Cada vez que usamos “yo soy” para expresar un atributo diferente a la naturaleza de Dios, nos separamos de la Luz. La física cuántica nos ha dejado claro que creamos la realidad a partir de lo que creemos. ¿Alguna vez has dicho que eres desorganizado, indisciplinado, enfermizo, impuntual, idiota, o cualquier otra descalificación? ¿Lo has dicho de otra persona? La conciencia se alimenta de la luz presente en nuestras experiencias.

La conciencia evoluciona por las variables de energía que va asimilando. El poder de crear es una variable que nos llega gracias a la energía del amor, el aspecto femenino de la sabiduría. ¿Es amoroso restar valor a otras personas?A final de cuentas, lo que decimos de otros muestra lo que creemos de nosotros mismos.A veces, intentamos engañarnos a nosotros mismos al decir que no hablamos en serio.

¡La energía siempre regresa a su fuente! Y es indudable que la palabra tiene poder, el poder es energía. El conocimiento de la realidad cambia, según el lugar, las personas y las cosas donde ha estado expresándose y manifestándose. Si lo que sale de nosotros no contiene Luz, impedimos la evolución de nuestra conciencia. La creación es un campo de experiencias para crecer, y ¡no es juego!

Ram Dass, autor del afamado libro “Be here now”,decía que el próximo mensaje que necesitamos escuchar está en lo que ocurre en nuestro presente. Para crear algo nuevo es necesario destruir (soltar) lo anterior. El caos me ha permitido hacer una revisión profunda y detallada de mi nivel de conciencia. ¿Cómo pretendemos crear algo nuevo desde el querer evitar las molestias características del proceso?

Esta experiencia me ha permitido descodificar valiosos mensajes dentro de mi situación, y sé que aún hay muchos más. Gracias al desorden que he vivido en estos dias tengo más información de mí, veo con claridad mi siguiente paso, y he emprendido acciones para aprovechar las energías maravillosas de “doble bendición para crear” contenidas en el 2014 (7+7=14). Creo y confío en el universo, y tengo la certeza de que así es.

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