POR JORGE RAMOS
El concepto de fábrica de sueños ideado por Guillermo Cordero para el Casandra 2006 resultó un gran espectáculo escenográfico donde se conjugaron la música, el canto, la coreografía, el vestuario, las luces y los efectos especiales.

Si bien el público que llenó la Sala Eduardo Brito del Teatro Nacional disfrutó en vivo de la producción en equipo, los televidentes pudieron apreciar desde sus hogares el gran despliegue de recursos técnicos y visuales que convirtieron esta entrega en la más vistosa y espectacular de todos los tiempos de la unión de ACROARTE y Cervecería Nacional Dominicana.

La noche de emociones comenzó justo a las 9:00 cuando Telecentro y RNN comenzaron la transmisión de la ceremonia, con el saludo y la imagen de la inolvidable Casandra Damirón en pantalla gigante, abriendo las cortinas para dejar ver las primeras impresiones escenográficas de Fidel López. Acto seguido los recursos técnicos de iluminación y efectos láser se proyectaron desde el centro del escenario hacia el auditorio, dando soporte a la supuesta fábrica de las estatuillas del Casandra.

Los méritos de iluminación del espectáculo son para el maestro Bienvenido Miranda y Juan Tejera, bajo la dirección de Jorge Caraballo.

Otro elemento sobresaliente de la gran noche de estrellas nacionales e internacionales del pasado martes fue el baile, un fuerte soporte de Guillermo Cordero con Isadora Bruno e Iván Tejada como invitados, proyectando la destreza, la firmeza y la precisión de 29 bailarines en el escenario. Pero las expresiones corporales no significarían nada si no hubiesen contado con la música que sustenta la coreografía. Ahí entró el trabajo del maestro Manuel Tejada, en cuyos hombros descansó la dirección musical y los arreglos de todo el montaje, salvo el segmento homenaje a Lope Balaguer, que fue dirigido por Jorge Taveras.

Un punto a su favor tiene René Brea en lo que tiene que ver con la producción de televisión del ceremonial, así como Gilberto Rivera en la dirección de cámaras, cuyo único factor en contra fue la transmisión de la alfombra dorada, debido a la estrecha área que le dejaron a los entrevistadores, aparte de la invasión del público que dificultó el trabajo de camarógrafos, periodistas y fotógrafos.

Una vez más la actriz y productora de espectáculos Aidita Selman demuestra su gran talento y creatividad, al llevar con éxito a la realidad este guión de los premios Casandra 2006, donde además trabajó como directora escénica.

Y del vestuario ni hablar, el diseñador Jorge Diep tuvo mucha tela por donde cortar para cada uno de los segmentos que conformaron esta edición del premio que otorgan los cronistas de arte de la República Dominicana, desde el inicio con Fábrica de sueños, hasta el final con Guardianes de sueños, protagonizado por nuestro Juan Luis Guerra.

En la regiduría de escena y dirección técnica del espectáculo, que ha tenido casi todas las críticas a su favor, trabajaron los expertos Marosa Mallorga y Antonio Parodi.