Hoy 
Mañana se celebra el Día Mundial del Ataque Cerebral, por esta razón y porque regresamos la pasada semana de participar en el 8vo. Congreso Mundial de Stroke, celebrado en Brasilia, la hermosa capital brasileña, deseamos tratar el tema de los derrames.
Auspiciado por la Organización Mundial de Stroke, el cónclave reunió a las autoridades mundiales más prominentes en este aspecto de las neurociencias. La palabra Stroke es un anglicismo que significa ataque y que nosotros conocemos popularmente como derrames cerebrales. Estos pueden ser de dos tipos: los hemorrágicos y los isquémicos, los primeros sangran sea dentro del cerebro o fuera de él y los segundos, los isquémicos, producen manifestaciones clínicas por falta de sangre- anoxia- ya sea de manera temporal o definitiva en el peor de los casos, con sus nefastas consecuencias invalidantes y su gran mortalidad.
Uno de los simposios más concurridos durante el evento internacional celebrado en el Palacio de Congresos Ulyses Gaimares de la moderna capital carioca, fue el titulado Optimizando el stroke agudo con Cerebrolisyn, mejoría y recuperación. En la oportunidad tres neurólogos, autoridades mundiales en el campo de los derrames participaron: los doctores M. Chopp, de Estados Unidos; M. Brianin, de Austria, y R. Maturana, de Chile. Trataron varios tópicos sobre el Cerebrolysin o Renacez como se conoce este medicamento en el país, medicación que actúa para mejorar las neuronas lastimadas y ayuda a la formación de nuevas vías para la recuperación del tejido nervioso afectado tanto en los derrames cerebrales principalmente los isquémicos-, los traumas de cráneo y en las demencias tempranas.
El manejo de estas entidades neurológicas con esta nueva medicación y su uso particular en el manejo de los derrames y que en lo personal me ha dado resultados muy positivos con mis pacientes, será el tema de otros conversatorios. Algo que deseo compartir con mis amables lectores, es el hecho de que en la elegante cena de despedida, auspiciada por los Laboratorios EVER de Austria (Laboratorios LAM) nos reunimos los representantes de ocho países latinoamericanos en el hotel Mercure de Brasilia a compartir nuestras experiencias positivas con los derrames cerebrales, los traumas craneanos y espinales tratados con el Renacenz. Me correspondió el alto honor de representar el país y compartir mis experiencias con los colegas latinoamericanos. Esa noche se puso en circulación para toda América Latina, el libro Enfermedad Vascular Cerebral.
Los derrames cerebrales tienen una mortalidad alarmante y una serie de secuelas invalidantes que la hacen una entidad de gran importancia en la salud pública, con el agravante de que estos daños acontecen más en países en vías de desarrollo. Se estima que 59 millones de personas al año mueren en el mundo por estos accidentes cerebrovasculares o sus secuelas letales. ¿Cómo podemos evitarlos? varios son los enfoques para su prevención, pero todas las recomendaciones científicas propugnan por una modificación global en el estilo de vida. Factores conocidos como: el tabaquismo, la diabetes, la hipertensión arterial, el exceso de alcohol, la vida sedentaria, el sobrepeso, las grasas elevadas en sangre, el consumo de drogas, el estrés psicosocial, los tratamientos hormonales, dietas chatarras, la etnia, la herencia con antecedentes familiares, están entre los elementos de importancia en su producción. Evítelos, consulte a tiempo su médico amigo; la prevención es lo ideal y existe.
