El Club de Roma, fundado en la capital italiana en 1968 por el Presidente de Olivetti, Aurelio Peccei, es una ONG cuya finalidad última es encontrar soluciones a la problemática mundial. Está compuesto por empresarios, políticos, expertos y académicos de América, Europa y Japón. Inicialmente se interesaron en el análisis sistemático de las perspectivas de la energía. Luego abarcaron el problema de la humanidad en relación con los límites físicos de los recursos de la Tierra, el rápido crecimiento de la población y el consumo y las medidas a adoptar. Jay Forrester, ingeniero, científico en computación y profesor de MIT, en su trabajo de 1971 “World Dynamics” concluyó: “El desarrollo ulterior de la humanidad sobre la Tierra y las limitaciones físicas del medioambiente dará lugar a desastres los próximos veinte años”.

Hace mil años que los mayas ya habían profetizado todos estos problemas desde otra perspectiva y, además, se refirieron a un gran cambio que se oficializaría en diciembre del 2012.

Los preliminares de las profecías están a la vista de todos. Erupciones volcánicas, terremotos, inundaciones, sequías, alta contaminación industrial provocadoras de alergias y enfermedades mortales, debilitamiento de la capa de ozono, huracanes, deforestación. Nadie puede garantizar que no se pueda producir un caos informático internacional. El sistema económico mundial que está en crisis comenzó en Estados Unidos en 2007. Todas las crisis actuales, con la energética a la cabeza, siguiendo la contaminación del medioambiente y el efecto invernadero, conllevarán a un gran desastre por el cual no debemos preocuparnos, pues es irreversible, sino ocuparnos y prepararnos, tanto psíquica como espiritualmente, haciendo cada uno lo que le corresponda y jugando el papel que le toque. Pasado éste, si el hombre se transforma como esperamos, devendrá el hombre nuevo, donde el mundo será un lugar donde no habrá espacio para la pobreza y donde la comunicación entre los seres humanos estará basada en la honestidad y el amor y desde el cual surgirá un verdadero Nuevo Orden capaz de dar respuesta a todas las necesidades.

Es claro que se está produciendo el final de una era oprobiosa que está operando cambios importantes en la conciencia del hombre.

 Los Mayas con sus mensajes dejaron claves que habrán de conducirnos a un mundo mejor. En nuestras manos tenemos la llave.