El comercio en la avenida Mella pierde su antiguo dinamismo

Poco fue el flujo de compradores que se alcanzó a ver ayer en las mayorías de las tiendas ubicadas en la avenida Mella. Desde hace un tiempo el comercio en esta calle ha ido cayendo cada vez más, según cuentan encargados y propietarios de negocios, quienes alegan pérdidas y hasta posibles cierres de sus establecimientos.
Y es que esta zona, antes visitadas por muchos turistas y consumidores locales debido a la variedad de productos que se podían encontrar allí, hoy no vende casi nada, según los comerciantes.
Aunque señalan varios factores como causa de la situación, muchos de los vendedores coinciden en que la falta de dinero es el principal.
“Hace ya alrededor de un año que el flujo de personas que venía a comprar se ha reducido de una manera exagerada. Uno tiene suerte cuando ve 10 clientes que entran a la tienda y cinco de estos compran”, manifestó Teresa Camilo, encargada de ventas en Plaza París.
Dijo que la mayoría de los consumidores van a la tienda a mirar los artículos, pero que al final, en ocasiones, se llevan algo o en muchas ocasiones nada, debido a la falta de dinero.
“El comercio se nos ve más afectado porque sino vienen personas a comprar, se nos estanca la mercancía, el capital se va disminuyendo porque lo poco que tenemos para vender hay que bajarle el precio para que la gente pueda comprar. Para esta época de Semana Santa, en otros años ya nosotros teníamos la tienda llena de gente buscando piscinas y trajes de baño, pero ahora somos dichosos si vienen 20 gentes a mirar y diez compran”, expresó.
Camilo aseguró que las ventas en la tienda han caído alrededor de un 65%.
Entiende que la situación por la que ha bajado el flujo de compradores se debe a la delincuencia que opera en el lugar y la incomodidad del transporte, debido a la necesidad de parqueos.
Dijo que muchos comercios han decidido irse a otros lugares donde sí puedan ofrecerles a su público seguridad y facilidad de transporte.
Otros vendedores manifestaron que producto de la situación por la que atraviesan sus negocios han tenido que despedir personal, para reducir gastos y poder cumplir con otras obligaciones.
Juan Ramón González, vendedor en el lugar, dijo que el público que antes tenía ese comercio eran las personas que regularmente iban a la avenida Duarte a comprar, pero que ahora con la construcción de plazas, han perdido gran parte de sus compradores.
Aseguró que en su negocio las pérdidas sobrepasan el 50 por ciento y que para poder mantenerse ha tenido que incurrir en préstamos.