El presidente del Consejo Nacional de la  Empresa Privada (Conep) afirmó anoche que el Gobierno no debe cargar más  impuestos a quienes pagan y abogó por la  formalización de la economía,  para que se cobre  tributos a   los negocios subterráneos,  que no pagan impuestos, lo que  ayudaría a reducir el déficit fiscal.

Manuel Diez Cabral presentó anoche los resultados de la Convención Empresarial 2011, donde se manifiesta el interés  del empresariado  en colaborar para que el país salga de la inercia  y se ejecuten acciones que eviten más exclusión y pobreza.

 Afirmó que la reforma fiscal debe ser integral, que propicie el desarrollo sostenible, no un parche tributario. Insistió en que el Gobierno baje  el gasto.

“En lugar de hablar a quién cargar con más impuestos, lo que se debe hacer es que la economía se formalice, ya que ahora el 60% de los empleados son informales”, manifestó.

Rompamos la Inercia.  Los resultados de la Convención   plantean que se elimine el 1.5% de anticipo del Impuestos Sobre la Renta   y el 1% a los activos y cambiar el método de recaudación  para que en lugar de ser por el método de lo devengado, sea por lo percibido,  lo que  incentivaría la inversión, la producción y se reduciría la evasión fiscal.

“Dado que actualmente la carga fiscal recae relativamente sobre pocos, por la evasión y por la fuerte presencia del sector informal en la economía, propugnamos porque, como en otras sociedades, los impuestos recaigan  sobre la totalidad  de la economía”, indica.

Sugirió  el uso de los fondos de  pensiones en proyectos productivos  y que  en 10 años se baje el  coeficiente de la deuda pública, incluyendo la cuasi fiscal a 20% del Producto Interno Bruto. En la actividad se hizo un homenaje póstumo a Francisco José  Castillo, quien fue director ejecutivo del Conep, y se entregó una placa a su esposa Altagracia viuda Castillo.     Elena Viyella de Paliza resaltó su labor.

Las claves

1.  Ampliar la base

En su informe el Conep considera que la reforma fiscal debe propiciar que los sectores productivos puedan competir en igualdad de condiciones frente a sus competidores regionales y mundiales, para lo que se deben  eliminar cargas impositivas que frenan su competitividad.

2.  El modelo económico

Plantea que se reoriente  el modelo económico hacia una economía  más competitiva  y más inclusiva, adaptando las políticas macroeconómicas, de tipo de tasas de interés real, tributarias y de gastos para ese propósito.