El Consorcio Impe, que interpuso un amparo contra la licitación de las plantas de carbón, rechazó que sea parte de una conspiración para sabotear la construcción de la central de energía eléctrica.

Aseguró que acudió a la justicia en vista de que la comisión licitadora asignó el contrato a Odebrecht en violación a una disposición del Congreso Nacional y los propios términos de referencia, legalizando una supuesta sobrevaluación superior a los US$1,100 millones.

Entiende que la comisión tuvo un manejo burdo y parcialiazado a favor de Odebrecht.

El Tribunal Superior Administrativo suspendió la licitación por la inconsistencia en el presupuesto de la obra previsto en US$1,500 millones, pero fue adjudicada por US$2,040 millones. Sin embargo, el vicepresidente ejecutivo de la Corporación Dominicana de Empresas Eléctricas Estatales (CDEEE), Rubén Jiménez Bichara, dijo que continuarán con la construcción.

Recientemente el presidente Danilo Medina afirmó que existe una conspiración contra las plantas cuando deberían ser defendidas por todo el país, porque con estas se reduciría el déficit del sector.

En un comunicado suscrito por los ingenieros Raúl Cabrera y Manuel Sebastián, representantes de IMPE, el consorcio calificó como “groseras violaciones cometidas por la comisión de licitación para otorgar el contrato de construcción a la firma Odebrecht, cuyo costo sobrepasa todos los valores promedio estándares a nivel mundial”.

Afirmó que la comisión desconoció un mandato del Congreso Nacional que fijó en un máximo de US$1,500 millones la contratación de las dos plantas y pasó por alto los términos de referencia que establecían la obligación de todas las empresas participantes de presentar una oferta de financiamiento para el proyecto.

Alegó que la única empresa de las cuatro que participaron en la licitación que carecía de oferta de financiamiento era Odebrecht y sin embargo la comisión le adjudicó la construcción.

IMPE indica que la oferta económica de Odebrecht fue de US$2,040 millones, US$640 millones por encima del tope aprobado por el Congreso y US$1,140 por encima de la oferta que presentara junto a Gezhouba Group Company por US$900 millones. Las demás ofertantes fueron Secop III, con US$1,150 millones, y Posco con US$1,200 millones.

Mal informado. Los representantes de IMPE entienden que el Presidente está mal informado de la realidad, razón por la cual gestionan una reunión con él para edificarlo “ a fin de que adopte la posición que más convenga a los intereses del Gobierno y el país”.

Cabrera y Sebastián defendieron su experiencia en el sector eléctrico. El primero fue subadministrador técnico, director de Ingeniería y gerente de Redes Eléctricas de la CDEEE. El segundo fue director de Producción, Mantenimiento y Rehabilitación Plantas de la CDEEE y gerente de la central térmica Haina.

También participaron en la preparación del programa de Gobierno del sector eléctrico a solicitud de Medina, entonces candidato.

Dijeron que junto a Hipólito Núñez, Pedro Almonte, Julio César Correa, Gabriel Aldebot, Frank Núnez y Eduardo Martínez, identificaron un conjunto de iniciativas para mejorar el sector eléctrico, entre ellas el cambio de matriz de generación.