Varios días después de hacer público su padecimiento de COVID-19, la comunicadora Mariasela Álvarez vuelve a referirse al tema pero esta vez con noticias muy positivas: ya ha superado el coronavirus.

«El Coronavirus fue benévolo conmigo, y con eso ya me quitó una de las grandes incertidumbres que todos tenemos», publicó la conductora de televisión en su cuenta de Instagram.

De inmediato, la presentadora de «Esta Noche Mariasela», quiso compartir con sus seguidores algunas de las lecciones que le ha dejado este proceso.

«Este proceso me ha dejado algunas certidumbres. A partir de mañana empieza de nuevo la rutina de la vida que todo lo envuelve, pero ahora pretendo hacer algunos cambios», escribió Mariasela.

A continuación compartimos de manera íntegra el mensaje que ella publicó:

Ya casi termina la Semana Santa y con ella, el ciclo de «cautiverio» y soledad al que me sometió la infección de Covid en estas últimas dos semanas. Los planes que había hecho con mucha ilusión para estos días de asueto, cambiaron drásticamente, pero al final, los de la vida siempre son más interesantes y aleccionadores que los nuestros.

He sentido en la distancia el cariño de muchos que se mantuvieron pendientes, preocupados por la salud de Rebeca y mía, y por nuestras necesidades. Recibí alimentos para el cuerpo, la mente y el alma, de las personas menos esperadas. Estando así surgen necesidades que no puedes satisfacer porque debes estar aislada, así que esas pequeñas ayudas ¡significan mucho! No tengo cómo agradecerles, ellos saben quienes son. Como también saben quienes son los que oraron por nosotras en silencio… ¡Gracias!

El Coronavirus fue benévolo conmigo, y con eso ya me quitó una de las grandes incertidumbres que todos tenemos, pero también me ha dejado algunas certidumbres. A partir de mañana empieza de nuevo la rutina de la vida que todo lo envuelve, pero ahora pretendo hacer algunos cambios.

Para empezar, hacer lo que sienta, cuando lo sienta, sin mucha planificación. No dejaré para después lo que me importa ni a los que me importan, pero sí dejaré de tratar de «salvar al mundo» y pensaré más en mí y mi Paz. No pensaré en la edad, ¡no existe!, o el tiempo que queda, ¡nadie lo sabe!

Y como dijo el poeta Cortez… “Cada golpe de suerte empezaré a medir a partir de mañana.
De mi viaje de ida empezaré a volver a partir de mañana.
La mitad de mi muerte empezaré a morir a partir de mañana.
La mitad de mi vida empezaré a vivir… a partir de mañana”… ¡Ahora con más Fe!