El déficit comercial de Estados Unidos

El déficit comercial de Estados Unidos

Por decenios la economía norteamericana ha venido registrando un déficit comercial crónico, persistentemente creciente. Se explica no solo por tratarse de una sociedad altamente consumidora que engulle una buena parte de lo que produce, así como, también, gran parte de lo que produce el resto del mundo sino porque, además, se ha permitido ir perdiendo competitividad ante otras economías.

En el 2008 el déficit global frisó los 700 mil millones de dólares. Obviamente, en el 2009, debido a la crisis severa que estuvo sufriendo esa economía, el déficit cayó sustancialmente situando el acumulado, hasta octubre, en 304 mil millones frente a 610,800 que había contabilizado hasta el mismo mes en el 2008. Para el 2009 el déficit total – aún no publicado – debe haber alcanzado una posición por encima de los 370 mil millones. Esa mejoría en el monto del déficit – reflejando solamente una reducción en el nivel del mismo – se sustentó en una caída importante de las importaciones y un incremento de las exportaciones ayudadas, en gran medida, por un dólar depreciado.  

En julio del 2008 el déficit alcanzó la astronómica cifra, para un mes, de 64,900 millones de dólares. Aunque los niveles de los últimos meses del 2009 recogen una caída notable del mismo, tenga Usted la seguridad de que en un futuro, tan pronto como la economía estadounidense refleje una recuperación efectiva, aquel será superado.

Cuando comenzó este siglo el déficit de la economía norteamericana superaba los 100 mil millones, de los cuales unos 65 mil correspondían al desequilibrio comercial a favor de la economía japonesa. Ello ha cambiado radicalmente pasando el déficit con Japón a un lejano segundo lugar, superado por el déficit con China Popular ya muy por encima de los 200 mil millones de dólares.

Aunque no es el caso de la República Dominicana, la cual ha visto que el acuerdo de libre comercio ha actuado en sentido inverso al esperado provocando un creciente desbalance con esa economía, lo cierto es que la mayor parte de la América Latina registra un superávit en el intercambio con los EE.UU. liderados por México y Venezuela, seguidos por Chile y Brasil entre otros.

El Secretario de Comercio norteamericano – Gary Locke – acaba de pronunciar un discurso en el que delineó los objetivos estratégicos de los EE.UU. en el terreno comercial, insertándolo en el programa que acaba de proyectar el Presidente Obama para la creación de empleo. Ese plan global plantea la meta de incrementar la competitividad y eliminar barreras aduanales. Con ello esperan duplicar las exportaciones en un periodo de 5 años. Las potencialidades están enfocadas en sectores visualizados como de gran dinámica: productos y servicios orientados al medio ambiente, las energías renovables, así como en productos de la salud y la biotecnología.

Publicaciones Relacionadas

Más leídas