La Dieta Mediterránea caracterizada por establecer las pautas de la alimentación más saludable, propone la carne de conejo como uno de los alimentos tradicionales que forman parte de ella más saludables.
Esta es una de las razones por las cuales la carne de conejo, que destaca por ser magra y con alto contenido en vitaminas del grupo B (B12, B9 y B6), cuenta con un gran arraigo dentro de ese tipo de cocina.
De hecho, hay varios platos famosos dentro de la cocina del mediterráneo como son el conejo al ajillo o la paella con carne de conejo.
La carne de conejo conjuga muy bien con una gran cantidad de ingredientes. Además, su bajo contenido en sodio permite el uso de una gran variedad de hierbas aromáticas y especias que realzan su sabor.
En definitiva, la carne de conejo convive a la perfección con la cocina tradicional y la más innovadora.
Las diferentes partes del conejo y su cocción. El conejo siempre se cuece sin piel. Por eso absorbe mucho las materias grasas.
Si cuidas su línea, evite cocinarlo con mantequilla, aceite o crema y privilegia la cocción al vapor.
Piensa en las especias y en las hierbas aromáticas para resaltar el sabor de la carne.
Las claves
1. Las combinaciones más exitosas con la carne de conejo
Las especias: cardamomo, curry y paprika.
2. Sabores
El sirope de arce, la miel y el azúcar moreno, sidra, vino blanco y tinto.
3. Las hierbas
Albahaca, estragón, romero, ajedrea, salvia, tomillo.
4. Frutas
Arándanos, frutos secos y ciruelas.
La receta
Jamoncito de conejo con verduras
4 unidades de conejo, 1 vino tinto
1 zanahoria
Varias ramitas de puerro
4 papas
1 chorrito de coñac
5 ajos tiernos
1 cebolla
1 Jengibre
Romero al gusto
La piel de una naranja
La piel de un limón
1 rama de canela
3 hojas de gelatina sin sabor
1 cucharada de orégano en polvo
1 cuchara de pimienta molida
Unas ramitas de enebro
Preparación. Poner las cuartos piezas de conejo en una bandeja honda y sazonar con las especias (romero, orégano, jengibre y pimienta); añadir el vino, el coñac, todas las verduras limpias y cortadas en juliana, el enebro, la piel de naranja y limón y la canela. Dejar que macere tres horas. Sacar después las piezas de conejo, pasar por una sartén caliente y luego poner en una cazuela. Los cítricos y todo lo demás del escurrido se dora en una sartén para que tenga un sabor tostado y se añade también a la cazuela del conejo. Tapar con papel de aluminio y cocer durante 45 minutos hasta que quede blando.