Como un hecho de connotada relevancia mundial, la Asamblea General de las Naciones Unidas (ONU), aprobó en el año 2013, mediante la resolución 65/4 proclamar el día 6 de abril cada año, Día Internacional del Deporte para el Desarrollo y la Paz. Es decir, que mañana viernes se celebra la festividad con diversos actos en la mayoría de las naciones de los cinco continentes, con el auspicio de la UNESCO, organismo que ha catalogado a esta influyente manifestación como una forma esencial de expresión humana que contribuye a incrementar la dignidad humana y fortalecer las sociedades en su conjunto.
El deporte constituye una de las actividades más completas y que reporta mayores beneficios por su carácter transversal a la salud, la educación, la cohesión social, la cultura, la recreación, la amistad entre los individuos y las relaciones entre los pueblos. Sin embargo, aún con tales bondades todavía hay gobiernos-principalmente en países en vías de desarrollo- que no se deciden por realizar mayores inversiones de recursos financieros en el sector, pues parecen desconocer que una población mejor entrenada y recreada, es menos vulnerable a las enfermedades y está en condiciones de ser más productiva a la sociedad.
Se debe reconocer que uno de los requisitos fundamentales para poner en vigencia un proyecto de nación en deporte, es contar con una efectiva estrategia de educación ciudadana a todos los niveles, comenzando desde las etapas primarias. La concreción de la misma contribuye a que cada ciudadano como sujeto individual, grupo o nación, logre su desarrollo físico, intelectual y afectivo, consciente de la importancia de sus positivos resultados.
Los ideales impulsados por la ONU y la UNESCO influyen de forma determinante en la conformación de un universo cada vez más tolerante y comprensivo a través de la práctica sana, desechando las trampas y acciones negativas que atentan contra la ética y la moral. Hay que reconocer que las naciones del primer mundo y las emergentes son las que ofrecen óptimas condiciones y servicios para lograr el éxito y una mejor formación a los usuarios, ya que tienen resuelta la cuestión alimentaria y disponen de programas de ciencias aplicadas al deporte desde el sistema escolar hasta los niveles superiores.
La República Dominicana es signataria de la Resolución 65/4 de la ONU desde su aprobación en el 2013, durante la gestión del Dr. Jaime David Fernández, donde se acordó además celebrar la festividad con diversos actos el 6 de abril del 2014, como el primer Día del Deporte para el Desarrollo y la Paz, es decir, que con la fecha de mañana, será la cuarta vez que se lleva cabo la misma, en un justo reconocimiento a una de las actividades más universales e impactantes para el género humano.
El MIDEREC, que en la presente gestión está dirigido acertadamente por el titular Danilo Díaz Vizcaíno, tiene programada una serie de actos en reconocimiento a la histórica fecha, a la vez que ha puesto en vigor un plan estratégico institucional, que desde ya proyecta, un importante paso a gran escala del deporte nacional basado en innovadoras iniciativas, caracterizadas por el uso racional y prioritario de los recursos financieros.
El momento es propicio para crear conciencia de que el hecho deportivo en sus diversas vertientes es una manifestación fundamental, que debe contar con el pleno respaldo de las organizaciones internacionales competentes, así como de las organizaciones deportivas regionales, nacionales, las entidades no gubernamentales y el sector privado.