Heriberto Morrison 
En un ambiente de unidad y cordialidad fue celebrado el pasado martes con diversos actos, el Día Nacional del Deporte con la participación de los principales operadores públicos y privados del sector, bajo el nuevo y dinámico liderazgo del titular Danilo Díaz Vizcaíno, cuyas iniciativas y ejecutorias en el marco del plan estratégico institucional, ha tenido en lo que va de la presente gestión un sonado impacto en la comunidad nacional.
Los resultados de la reciente encuesta Gallup-HOY sobre la valoración que tiene la población sobre el trabajo del Gobierno de Danilo Medina en 17 renglones en los últimos cinco años, arrojó en política deportiva, una favorabilidad de 56.1%, quedando en un tercer lugar entre las distintas áreas públicas que fueron sometidas a escrutinio, solo quedando por encima Educación (74%) y Construcción (65%). El cuarto lugar correspondió al sector agropecuario con 53.5%. Este nivel de valoración ha sido el más alto y sorprendente logrado en los anales por el sector, si se considera el hecho de que el presupuesto anual de MIDEREC es cercano a los 3 mil millones de pesos, con un ligero aumento de su partida para el próximo año, es decir, que todavía se mantiene en menos del 1% del PIB. Organismos internacionales como la UNESCO y la Unión Europea recomiendan a los gobiernos un 3%, de las partidas ejecutadas en la mayoría de las naciones desarrolladas y en algunas emergentes.
Pero, ¿Cuál ha sido la “magia” para cristalizar un indicador de impacto de notable ascenso en la administración del Presidente Medina, consiguiendo su mejor rating en el último sondeo? Una de las claves ha sido la priorización de los recursos que se otorgan a las organizaciones subvencionadas con los fondos públicos para el fomento deportivo y el pleno apoyo a los compromisos internacionales de la alta competencia, cuyos resultados preliminares en eventos clasificatorios proyectan un nivel de avance en el vigente ciclo olímpico.
Desde que asumió las riendas de la agencia oficial, Danilo Díaz propuso un Pacto Nacional por el Deporte mediante la implementación de una acertada política de puertas abiertas para todos, una iniciativa que ha contado con una amplia acogida, que abarca las distintas vertientes de la actividad y un diálogo franco entre los actores del espectro doméstico. Los demás ejes del plan son: el deporte como derecho fundamental, y el deporte como marca-país.
Las buenas relaciones cultivadas entre MIDEREC y el COD en la actualidad, han matizado un ambiente de confianza recíproca, superando etapas de tensión de tiempos pasados. Sin embargo, uno de los retos principales que la agencia oficial debe afrontar, es la creación de una nueva Ley General del Deporte, donde MIDEREC recupere todas las atribuciones legales y constitucionales que le corresponden, derogando la desfasada Ley 356-05.
El paso más trascendente ha sido el convenio de colaboración con el Ministerio de Educación, que consiste en el fomento y desarrollo del deporte en las escuelas, sentando las bases para un nuevo modelo de desarrollo deportivo en procura del mejor provecho a la jornada extendida que fortalecerá los centros de iniciación deportiva. Propiciar que la misma por primera vez se aplique en el país, es la garantía para un real y masivo desarrollo en el sector, como ha ocurrido en las naciones más avanzadas.
Uno de los grandes retos de la presente administración lo constituye el rescate de los Juegos Deportivos Nacionales, cuya XIV versión se llevará a cabo en el mes de marzo del próximo año, con la participaran por primera vez de ocho zonas, incluidas tres integradas por dominicanos en el exterior, proyectándose desde ya como los más esplendorosos entre todos los realizados. Con todas estas iniciativas y ejecutorias impulsadas en un tiempo récord, hubo motivos para celebrar el Día Nacional del Deporte, con gran júbilo y optimismo.
