Albert Pujols botaba basura por 50 pesos y ahora tiene un salario minino de 30 millones de dólares

Albert Pujols es autor de una historia interesante desde cualquier perspectiva que se mire.
Al entrar a la que podría ser su última temporada en Grandes Ligas, Pujols solo tiene agradecimientos por todo lo que Dios y la vida le ha dado como persona y como pelotero de Grandes Ligas.

Recuerda que cuando era un chico, una vecina le daba 50 pesos para que le botara la basura.

Hoy exhibe una fortuna de 314 millones de dólares y en el posible último año en la pelota ganará 30 millones.

Hay algo que lo llena de orgullo: «El dinero no cambia a nadie. Creo que soy el mismo Pujols, el hombre que viene de la pobreza, se fajó y pudo lograr el éxito», dijo el popular jugador durante una entrevista con Frank Camilo para el programa Mister Deportes de CDN.

«Yo limpiaba zapatos, conozco las necesidades y por eso hoy ayudo a la gente con mi fundación. Y aclaro, no soy partidario de divulgarlo porque es algo que uno debe hacerlo para el agrado de Dios», expuso. Muy joven, sus padres se divorciaron y él comenzó a vivir con sus abuelos.

Su madre se fue a vivir a Panamá y su padre tiene estadía en Kansas City.
Su familia no era rica, pero nunca faltó la comida, algo que le daba tranquilidad.
«No me da vergüenza recordar mi pasado, yo he tenido que superar muchos obstáculos y las cosas no han sido tan perfectas como la gente piensa», asegura.

«Mis padres empeñaban hasta abanicos para que no faltara comida», reveló en tono firme.
«Yo conozco la pobreza y por eso seguiré ayudando», dijo el grandesligas.
Pujols agradece a Dios que le dio talento y el don para brillar.

«Yo quiero motivar a los jóvenes para que vean que si yo pude, ellos también pueden lograr su sueño», señaló Pujols.