CHICAGO — Eloy Jiménez tiene una predicción para el 2020.

Pero no se trata del equipo, sino de su defensa del jardín izquierdo, la cual no fue del todo buena en el 2019.

«Va a mejorar», dijo el dominicano con un sonrisa en el SoxFest. «He puesto más esfuerzo en este receso de temporada. Va a mejorar».

Hubo momentos en la temporada pasada cuando parecía que la defensa de Jiménez podría mejorar, pero seguía enfrentando problemas físicos que lo mantenían alejado del terreno. Los White Sox no pueden darse el lujo de perder esa tremenda capacidad ofensiva. Como novato detonó 31 jonrones, impulsó 79 carreras y tuvo OPS de .828.

El 26 de abril, el quisqueyano sufrió un esguince en su tobillo derecho cuando chocó con la pared del jardín izquierdo en el Guaranteed Rate Field ante un jonrón de Grayson Greiner. La verdad es que no debió correrle a ese elevado y además saltó tarde.

Jiménez estuvo ausente entre el 27 de abril y el 20 mayo por esa lesión. El 16 de julio en el Kauffman Stadium, Jiménez chocó con el patrullero central Charlie Tilson y sufrió una contusión en el nervio cubital derecho que lo apartó hasta el 28 de julio.

Su promedio de salto fue de menos dos pies comparado al promedio de un jardinero en las Mayores en el 2019, posicionando como 80vo de 98 jardineros calificados, según Statcast. Sus Outs por Encima del Promedio fue de -11, ubicándose de 88vo de 90.

«Mi salto y mi primer paso pueden ser un poco lentos», dijo Jiménez. «Pero he estado trabajando en ello y sé que puedo mejorar».

«Está entrenando», dijo el campocorto de los Patipálidos Tim Anderson. «Llegó temprano. Obviamente aún tiene trabajo por hacer, pero va a continuar. Vamos a incentivarlo a ser mejor y lograr que se convierta en el mejor guardabosque que puede ser».

Esos problemas no alteraron la confianza de Jiménez, quien de hecho lucía cada vez más cómodo con el pasar de la temporada. Parte de esa confianza viene de la rutina previa a los juegos que hizo con el coach de la primera base Daryl Boston.

Parte de ese deseo es porque no quiere tener nada que ver con el puesto de bateador designado.

«No», dijo confiado Jiménez cuando se le preguntó al respecto.

«¿Creo que puede mejorar? Absolutamente», dijo el manager Rick Rentería. «No tengo dudas de que este joven puede llegar a ser mucho mejor defensor de lo que creen. Pero para eso se requiere compromiso y trabajo. Y él tiene ambas».

Rentería ha hablado sobre el potencial de Jiménez a la defensa desde las Reuniones Invernales en San Diego. Ese desarrollo defensivo ayudaría mucho a Chicago, que podría mantener el bate de Jiménez en la alineación al final de los juegos, en vez de utilizar un reemplazo defensivo.

«No me decepcioné cuando Rick me sacó del juego», dijo Jiménez. «Sólo dije ‘no va a tener que hacerlo más porque voy a hacer un esfuerzo y trabajar más duro'».

Todos esos comentarios refuerzan la predicción de Jiménez.

«Van a ver un sorpresa este año», dijo Jiménez.