Sesión la Esquina Joven semanal del periódico Hoy, con el joven profesional Lenin Pacheco, durante una visita a la redacción del periódico Hoy. Foto/ Napoleón Marte 19/06/2019
Un emprendedor y una doble misión: lograr que sus proyectos sean efectivos, a la vez que ayuda a otros emprendedores. Esta es la idea de Lenin Pacheco un joven dominicano que tras haber puesto en marchas varios proyectos ahora busca ser “maestro” de otros que lo están intentando. Para ello ha apostado por tres líneas diferentes:
En primer lugar ofrecer asesoría directa a través de la plataforma “Emprende” a pequeños, medianos y grandes comerciantes. En segundo lugar, dar charlas con herramientas para capitalizar cualquier idea y ponerla a general dinero.
Y por último, cuenta con una página web (www.leninpacheco.com) en la que va contando su experiencia y comparte todos los trucos para sacar adelante un proyecto: desde dónde conseguir financiación hasta cómo crear una empresa con un mínimo de capital.
Pero ¿quién es Lenin Pacheco que tiene tanto para dar? Durante sus años de bachillerato cuenta que fue un mal estudiante, desgracia que arrastró hasta las aulas de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), donde tuvo que cursar la asignatura de matemáticas tres veces, para finalmente pasarla con un mínimo de 71 puntos.
“Inicialmente quise ser contable, porque era la carrera con más campo en ese momento; pero en la fila de inscripción me soplaron que estudiara mercadeo, que ahí no habían números. Para mi sorpresa me topé con las matemáticas”, explica.
Sin embargo no se conformó con ser un mal alumno y gracias a su determinación y disciplina logró seis títulos universitarios: licenciatura en mercadeo, máster en emprendimiento global, España, máster en mercadeo, UASD, postgrado en mercadeo, UASD, postgrado en desarrollo directivo, Barna, especialidad en gestión universitaria.
Durante años se dedicó a la enseñanza impactando la vida académica de unos 12 mil estudiantes, “he sido docente de escuela y de universidades a nivel de grado y postgrado”, explica.
Igualmente trabajó en diferentes empresas, logrando crear la imagen de varias marcas, hasta que un buen día decide emprender su propio negocio.
“Inicié en un rubro del cual no sabía absolutamente nada: corretaje de seguros, eso fue en el año 2011, ahí decidí dejar ser elegido para elegir y crear mi propia plataforma de negocios”, explica.
Murió el empleado y nació el empleador. “Cuando inicie en los negocios y empecé a administrar mi tiempo y mis ingresos, me dí cuenta de que en este país se educa a la persona para ser empleado”, lamenta.
Contra todo pronóstico nefasto, Lenin, asegura que ha logrado diversificar sus negocios y toda su experiencia la ha condensado y creó una carpeta de consultoría útil para el fortalecimiento, relanzamiento y creación de empresas.
“Mi función básica es poner a las empresas a ganar dinero, hemos trabajado incluso en traspaso de dueños tanto entre familiares como entre particulares”.
Servicios. Pacheco le ofrece a sus clientes acompañamiento en el área de análisis, para descubrir el comportamiento del consumidor, modelos de negocios, mercados, perfiles y competencias comerciales, flujos de información, modelos de reportes comerciales, informes financieros e impacto de las ventas.
Igualmente ofrece instrucción sobre diseño de la marca e incluso recursos humanos.
“Una vez tenemos lo anterior, trabajamos en el modelo de negocio y el modelo financiero para poner a rentar el negocio”, dice.
La era de los emprendedores. Los jóvenes de esta generación encabezan todo un movimiento de emprendedores, ponen en práctica sus ideas y las vuelven rentables.
Es por ello que este especialista en negocios asegura que es necesario crear la cultura de emprendimiento desde la niñez.
“El camino más efectivo para general riquezas es emprendiendo, de hecho pienso que se debería incluir como asignatura desde los primeros años de enseñanzas”, dice.
Pacheco asegura que entiende sobre los miedos o incertidumbres que genera ser su propio jefe, sin embargo le da esperanza que mucha gente tiene en su mente, ser independiente financieramente, mientras que otro número importante de empleados quieren dar ese paso, no solo por independencia sino motivados por tanto dueños de empresas que con niveles básicos de educación alcanzan facturaciones sorprendentes, pero muy sorprendentes.
“Recientemente, compartí en una de las aulas las ideas básicas de cómo construir tu primera empresa y la verdad, que aun en ese escenario lleno de estudiantes de grado y postgrados todavía veo en la mirada de las personas, esa necesidad de dar ese paso sin sentir ese miedo o vacío que pudiese generarse si las cosas no salen del todo bien”, dice.
Yo he perdido dinero iniciando negocios pero lo vuelvo a intentar” concluye.