El grupo terrorista Estado Islámico (EI) asesinó a 116 personas durante los veinte días que tuvo en su poder la población de Al Qariatain, en el sureste de la provincia siria de Homs y ahora bajo control gubernamental, denunciaron ayer activistas.
El Observatorio Sirio de Derechos Humanos, con sede en el Reino Unido pero con una amplia red de activistas sobre el terreno, explicó que los yihadistas acusaron a la mayor parte de sus víctimas de ser informantes y de colaborar con las autoridades sirias. La mayor parte de ellas -83 personas- fueron asesinadas por durante últimas 48 horas de su presencia en la localidad. Hay, además, varios desaparecidos que no se sabe si murieron a manos de extremistas o lograron sobrevivir.
Por otro lado, el Observatorio destacó que las fuerzas gubernamentales mataron a 12 personas a su regreso a la población. Un portavoz del grupo de activistas Centro de Información de Al Qariatain, Abdalá Abdelkarim, dijo por teléfono que han documentado cien muertos a manos del EI, de los que han identificado a 75.
“El ‘Dáesh’ (acrónimo en árabe de Estado Islámico) tenía una lista con personas sospechosas de haber colaborado con el régimen y las mató, ha llevado a cabo ejecuciones día y noche”, apuntó Abdelkarim, que es originario de Al Qariatain pero que se encuentra fuera por seguridad. Precisó que las personas asesinadas eran hombres de entre 16 y 60 años, y que algunos de ellos funcionarios. Además, Abdelkarim confirmó que efectivos gubernamentales mataron a varias personas, según sus datos 30, cuando retomaron Al Qariatain. El día 21, el ejército sirio recuperó Al Qariatain, situada en mitad del desierto.