Desde la llegada de Cristóbal Colon a la isla se vienen cometiendo estafa y fraude, de esa época podemos recordar el engaño que los indígenas sufrieron al cambiar de los espejitos por oro, hecho que se ha repetido en muchos escenarios de República Dominicana.
La historia se repite una vez más, pues el fraude que han cometidos miles de médicos es una evidencia que el dominicano lleva en sus genes la estafa. Según investigaciones publicadas por este diario, obtenidas desde fuentes médicas oficiales y del propio gremio, solo 60 de 5,000 artículos publicados en revistas médicas eran originales, lo que nos hace pensar en el porvenir de nuestro país.
Y es más grabe el caso, pues como lo afirman los doctores Nelson Rodríguez Monegro y Bernardo Defilló, que la falsificación y plagio de artículos para lograr puntos y obtener subespecialidades y residencias médicas es una vieja práctica que revela la existencia de una cultura de fraude sin consecuencias, y de una sociedad éticamente enferma.
La advertencia que hace el presidente del Colegio Médico Dominicano (CMD), doctor Wilson Roa, que ese gremio sancionará drásticamente a los médicos que se compruebe haya incurrido en plagio y falsificación de documentos para fines académicos.
Las autoridades judiciales han iniciado una investigación para determinar si hubo falsedad de escritura, tanto privada como pública, en los artículos médicos cuestionados que según el abogado penalista, Carlos Salcedo, se trata de una acción criminal y como existe un principio jurídico de que “el fraude todo lo corrompe, todo lo logrado por esa vía carece de legitimidad y debe anularse por ser doloso” y que esa acción es de naturaleza criminal y los responsables sometidos a la justicia enfrentan penas de hasta 20 años de prisión.
Aun el Ministerio de Salud evalúa el caso, y así dar una respuesta ante tan indignante suceso que llama a reflexión a esta sociedad que desde sus inicios está siendo estafada.
Si a nuestro fallido sistema sanitario les sumamos este terrible caso, qué nos espera, porque no podemos acudir al exterior a una consulta o aun tratamiento. El gobierno debe dar la cara ante tan preocupante caso.
Debe haber consecuencias drásticas para todo el que esté envuelto, a lo que luce ser una mafia donde hay muchos involucrados