El Gobierno de Puerto Rico no cerrará operaciones en noviembre

El Gobierno de Puerto Rico no cerrará operaciones en noviembre

San Juan, .- El Gobierno de Puerto Rico, que atraviesa por una grave crisis de liquidez, no cerrará operaciones o reducirá la jornada laboral de los funcionarios durante el presente mes de noviembre, una posibilidad que habían dejado entrever algunos funcionarios del Ejecutivo caribeño.

El secretario de Asuntos Públicos, Jesús Manuel Ortiz, dijo hoy en conferencia de prensa que el Gobierno dispone de los fondos necesarios para seguir operando en lo que resta de mes. “Dado los estimados de recaudación que tenemos hasta el momento, en noviembre no tenemos que tomar una medida como esa”, aseguró Ortiz.

“Ahora estamos trabajando para que en diciembre podamos también alcanzar una recaudación que nos permita continuar la operación y no tomar una medida como la que se ha estado mencionando, como la reducción de jornada”, matizó el funcionario.

Ortiz subrayó que la posibilidad de una reducción de jornada sería solo un último recurso en el caso de no contar con la liquidez necesaria. Además, dijo que el Ejecutivo sabe lo negativo que sería reducir la jornada laboral, aunque matizó que lo realmente grave sería tener que despedir funcionarios, algo a lo que recurrió el pasado Gobierno.

El secretario de Hacienda, Juan Zaragoza, informó esta semana que debido a los problemas de liquidez el Gobierno de Puerto Rico debe 300 millones de dólares a proveedores y 294 millones de dólares más están pendientes de ser devueltos a contribuyentes en concepto de reintegros por declaraciones sobre rendimientos del pasado año fiscal.

Zaragoza señaló que los meses de noviembre, diciembre y enero serán difíciles dada la liquidez disponible, ya que se tendrán que satisfacer las pagas extraordinarias de Navidad de los funcionarios y nóminas, entre otras partidas.

La dificultades para el Gobierno aumentaron la pasada semana después de que el Banco Gubernamental de Fomento (BGF) de Puerto Rico presentara uno de los registros de liquidez más bajos de su historia.