El gobierno no importará arroz y garantiza el abastecimiento del mercado local en lo que resta del año, a pesar de la pérdida de un millón de quintales provocada por las inundaciones de la semana pasada en el Bajo Yuna.

Así lo afirmó ayer el administrador del Banco Agrícola, ingeniero Radhamés Rodríguez Valerio, quien reiteró que la actual cosecha del cereal se estima en 10.5 millones de quintales y que el consumo nacional es de 8.5 millones de quintales.

Expresó que en la zona del Bajo Yuna hay unas 190,000 tareas cubiertas de agua que podrán significar una pérdida de un millón de quintales de arroz, Alo cual, aunque signifique pérdidas, por el gran trabajo, la gran labor que ha desarrollado el sector agropecuario del gobierno, podemos decir que garantizamos que no habrá que importar arroz, fruto de esa producción de aproximadamente 10.5 millones de quintales del cereal que se espera@.

El funcionario manifestó que aunque lamenta las pérdidas, «la garantía del consumo de los 8.5 millones de quintales de arroz en el país, aún está en pie@.

Dijo que una vez hayan comenzado a bajar las aguas, se continuará con la recolección del cereal, Aun cereal que es especial y principalísimo en la dieta de todos los dominicanos».

Rodríguez Valerio hizo sus señalamientos al pronunciar el discurso central del acto conmemorativo del 59 aniversario del Bagrícola, que tuvo lugar en la sede la institución.

Las actividades conmemorativas del aniversario del Bagrícola, se iniciaron con una misa en la iglesia Nuestra Señora de la Paz del Centro de los Héroes (La Feria), luego de lo cual Rodríguez Valerio, funcionarios y empleados de la entidad crediticia, se trasladaron al Altar de la Patria, donde depositaron una ofrenda floral.

En tanto, a la misa en la iglesia Nuestra Señora de La Paz, asistieron los principales líderes del sector agropecuario, el ex secretario de Agricultura, ingeniero Eligio Jáquez, el actual incumbente de esa cartera, ingeniero José Antonio Fabelo, el director del Instituto Agrario (IAD), ingeniero Tomás Hernández Alberto y el subsecretario Leonardo Faña, entre otros funcionarios.

En su intervención, el ingeniero Rodríguez Valerio dijo que la institución no celebró su aniversario con más festejos como es su tradición, debido a que la nación está conmovida por la tragedia de Jimaní, donde el desbordamiento del río Blanco causó la muerte a cientos de dominicanos y haitianos.

Agregó que, además, el momento no está para fiesta «porque hay partes de la República Dominicana que están totalmente inundadas».

Ponderó los logros del gobierno del Presidente Hipólito Mejía, Aespecialmente en el estrechamiento de la brecha entre pobres y ricos, para que de esa manera los pobres puedan contar con caminos vecinales, carreteras, servicios de salud, agua potable, viviendas y mejores condiciones de vida en los campos y zonas marginales@, las que dijo siempre han tenido los más ricos y poderosos del país.

«Estos ricos y poderosos han querido empañar la imagen del presidente Hipólito Mejía», agregó y advirtió que éstos «se van a encontrar con esa gran barrera de la mayoría de este pueblo, de los pobres de la nación reclamando lo que han recibido al día de hoy».

Rodríguez Valerio dijo, además, que recibió al asumir la administración de esta entidad un banco manual, pero que lo entrega como una institución moderna.

«Recibimos un banco, que ustedes saben que fue un banco manual y que ahora nosotros lo entregamos automatizado», subrayó.

Resaltó lo que consideró el mejor de los símbolos para la celebración del 59 aniversario del Bagrícola, un «bizcocho computadora», el cual dijo «es una muestra del cambio positivo que ha sufrido esta institución, un cambio que nadie puede soslayar ni nadie puede ocultar».