El gobierno  tendrá que proteger y estimular  sectores productivos

<P>El gobierno  tendrá que proteger y estimular  sectores productivos</P>

Aunque la República Dominicana no estará expuesta a grandes complicaciones internas a causa de la crisis económica global,  las autoridades oficiales tendrán que implementar medidas efectivas para proteger y estimular a los sectores productivos y encarar, en forma  definitiva -ya sea con recursos públicos o privados- una solución a la crisis energética.

Pero el gobierno también deberá observar con cuidado  cuáles son los efectos locales de las medidas proteccionistas que han estado adoptando las naciones desarrolladas, así como aumentar el gasto público y fortalecer las redes de protección social. Además tendrá que  prever cuál será  el impacto de la reducción en el flujo de la inversión extranjera, lo que sucederá a causa de las dificultades para acceder al financiamiento internacional.

Ese es el panorama que observa el economista Julio Ortega Tous, ex asesor económico del Poder Ejecutivo y antiguo secretario ejecutivo de la Comisión de Negociaciones Comerciales, adscrita a la Cancillería.

En sentido general, Ortega Tous no alberga mucho temor de que sectores vitales para la economía como el turismo, las remesas y las exportaciones vayan a registrar en el curso de este año caídas abruptas como han estado vaticinando algunos sectores.

Vistas así las cosas,  apuesta a que el país mantendrá su ritmo de crecimiento económico en una proyección muy cercana a la que está pronosticando el Banco Central (3%), institución que, según entiende, debe generar más credibilidad en el plano interno que la Unidad de Inteligencia de The Economist, por ejemplo.

“Yo creo que no se trata de ser optimista o pesimista, sino de ser objetivo, y de tomar en consideración cuáles son los factores que caracterizan a la crisis financiera global que se ha ido desplazando ya a una crisis económica en su conjunto, y su vinculación con la economía dominicana”, expuso el economista.

En primer lugar, recordó que la dominicana es una economía pequeña, no tan diversificada como la de los grandes países emergentes, en términos de su sistema financiero que,  contrario a lo que está ocurriendo en Estados Unidos, Europa y Asia, luce fortalecido  y con sobrantes en efectivo que superan los RD$140,000 millones.

Ortega Tous reconoció, sin embargo, que la economía dominicana no opera como un planeta aislado, sino que se trata de una economía de mediano desarrollo, poco sofisticada, pero con una característica que la vincula al resto de la economía mundial a través del turismo, las remesas, las exportaciones y las inversiones.

Lo que afectará.  Entonces, ¿cuál es el aspecto que a su entender afectará más a la República Dominicana? Que habrá una reducción importante del financiamiento externo.

 “Yo pienso que el financiamiento externo al sector privado por parte de la banca privada está cerrado en estos momentos, y ese es el aspecto que hay que tomar en consideración porque eso puede afectar a su vez los niveles de inversión”, dijo Ortega Tous.

Por otro lado, el economista resaltó que hay que temerle  al proteccionismo que se está desarrollando en los países en crisis,  pese al grito del Banco Mundial y de la Organización Internacional del Comercio (OMC). Hasta la fecha, dijo Ortega Tous, se han tomado 47 medidas proteccionistas en 17 de los 20 países más desarrollados del mundo.

“Esos países están cerrando sus mercados, entonces, eso sí tenemos que evaluarlo  y tenemos que proteger a nuestros productores tomando las medidas de estímulo”, recalcó el también ex embajador dominicano en Colombia y actual consultor privado.

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Como embajador

Siempre crítico con las políticas del Estado,  en octubre del año 2007 Ortega Tous fue suspendido por la Cancillería de su puesto como embajador en Colombia. La razón para ello fue el haber escrito un artículo en el que criticaba públicamente la política exterior del gobierno. 

La historia se repetía

Algo parecido le había sucedido a Ortega Tous años antes, cuando    fue cancelado del Banco Central por contradecir la política monetaria, y también fue cancelado de la Presidencia del Consejo de Desarrollo Económico y Social a mediados de 2005..

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