EDUARDO KLINGER PEVIDA
El Gran Caribe, ese conjunto de naciones agrupadas bajo un concepto geopolítico, comprende a todos los miembros de CARICOM, a las naciones centroamericanas y a Colombia, Cuba, México, República Dominicana y Venezuela.

Con Centroamérica y demás países latinoamericanos, excepto con Cuba, con quien las relaciones estuvieron interrumpidas por 40 años, República Dominicana desarrolló relaciones más o menos amplias. Sin embargo, esa no fue la situación respecto a las naciones independizadas en el resto del Caribe, a partir del decenio de los sesenta y setenta.

No fue sino a partir del gobierno de Leonel Fernández, en el periodo constitucional 1996–2000 en que el país identificó como uno de los ejes de su política exterior al Caribe, en que esa subregión – visualizada como Gran Caribe – comenzó a tener una importancia creciente en la estrategia internacional del país y a la República Dominicana se le comenzaron a ver potencialidades de liderazgo regional.

Aun con las limitaciones institucionales, competitivas y de gestión que se enfrentan internamente, lo cierto es que las relaciones del país con el resto del Gran Caribe son crecientes.

En ese contexto nada más lógico que la XI Feria del Libro en este 2008 se haya dedicado al Gran Caribe. Es sumamente importante de que la población en general tome conciencia de que somos un país caribeño y de que más allá de los sueños trasnochados de algunos, nuestro destino está inexorablemente ligado a la suerte de esta subregión, donde se encuentran dos terceras partes – 25 naciones – de todas las naciones del hemisferio – 35 países -.

Hay que hacer conocer que el Gran Caribe es un verdadero “arco iris de pueblos”, de culturas, religiones, de realidades y de potencialidades. ¡Qué gran sorpresa se llevan muchos cuando al visitar el Pabellón del Gran Caribe en la Feria descubren que esta subregión ha aportado 12 Premios Nobel!

También, desde hace varios meses, la Academia de Ciencias de la República Dominicana, AC–RD, ostenta la presidencia de la Comunidad Científica del Caribe, CCC, – de la que además es la sede permanente . El doctor Nelson Moreno Ceballos, presidente de la AC–RD es, en consecuencia, presidente de la CCC.

Hasta el 2010 la AC–RD y quienes la integramos tenemos la responsabilidad de catalizar el trabajo de divulgación y cooperación entre los científicos de la región. En Dominicana, a la vez, se tiene la responsabilidad de contribuir a crear una conciencia caribeña nacional y se debiera trabajar igualmente en hacer comprender la pertinencia de que el país se integre de manera plena tanto a CARICOM  como al Sistema de Integración Centroamericano, SICA. Esa decisión estratégica no limita ninguna otra opción nacional; por el contrario, la fortalece.