El juez de la jurisdicción permanente del Distrito Nacional dispuso anoche el envío a la cárcel de Najayo a Emilio Mesa Beltré (El Gringo), y a su esposa Yocasta Esmeralda Campusano, vinculados en el decomiso de 4.3 millones de pesos.  Ambos fueron recluidos en el pabellón de extraditable.

Un contingente policial sacó con cascos y chalecos antibalas a Mesa Beltré y a Esmeralda Campusano, rumbo a la cárcel de Najayo, en San Cristóbal, luego de que el juez Reynaldo Ferreira Tineo dictara prisión preventiva en contra de la pareja.

Con relación al hecho, y luego del imputado fuera detenido por miembros de la Dirección de control de Drogas y se registrara el decomiso de algunos bienes del capo del microtráfico, el jefe policial, Rafael Guillermo Guzmán Fermín, apuntó que terminaba el reindo de Mesa Beltré en el negocio de las drogas en los barrios pobres de la capital.

Guzmán Fermín, el fiscal del Distrito Nacional, Francisco Moscoso Segarra; el presidente de la DNCD, mayor general Rafael Rosado Mateo, habían allanado la agencia de cambio Solano, ubicada en la calle Juana Saltitopa, del sector Mejoramiento Social, buscando conexiones con el supuesto capo de Capotillo.

 El abogado de la casa de cambio Solano había informado a los periodistas que la investigación se efectuaba debido a un préstamo normal que el 31 de octubre le hicieron a una mujer vinculada al Gringo por un monto de 4.3 millones de pesos.