Dale Decker, británico de 37 años, sufre una de las enfermedades más crueles del mundo desde septiembre de 2012: tiene 100 orgasmos al día pero no puede disfrutar de ninguno de ellos.

¿Qué le provocó esta enfermedad? De acuerdo a una publicación en el sitio “que”, Decker explicó al diario “Mirror”, una sensibilización en la cadera ha sido la que le ha cambiado de vida, hasta tal punto que un día se cayó de una silla y se le desplazó una vértebra por culpa de los orgasmos, orgasmos que se dieron hasta cinco veces más camino del hospital.

El “síndrome de excitación genital” que sufre Decker le impide salir a calle, ya que en ningún momento del día paran los orgasmos. Sin duda, la situación más difícil a la que ha tenido que enfrentarse fue en el funeral de su padre, en el que llegó a tener nueve orgasmos con toda su familia delante.