Por CARLOS NINA GÓMEZ
El diez de noviembre, en el majestuoso Madison Square Garden de Nueva York, el invicto boxeador puertorriqueño Miguel Cotto arriesgará, por segunda ocasión, el título mundial del peso welter cuando enfrente al veterano púgil estaodunidense Shane Mosley.

Desde ya algunos analistas dicen que será «la verdadera prueba de fuego» para el gladiador boricua que no ha perdido una pelea en 30 subidas al cuadrilátero.

Pero otros expertos creen que el esgrimista caribeño, por su calidad probada, juventud, valentía y su estilo ortodoxo -Cotto puede pelear bien a las dos guardias (derecha e izquierda, de manera ambidextra)-, no tendrá muchas dificultades para revalidar el cetro de las 147 libras que avala la Organización Mundial de Boxeo (OMB).

En lo que coinciden los analistas -aunque el boricua salga como favorito-, es que será una pelea dura para ambos contendores, de gran historial.

Tras su batalla con Zab Judah, a quien noqueó en 11 rounds, el pugilista puertorriqueño enseñó muchas agallas.

 Mosley, quien ronda casi los 36 años de edad, sabe que no le será fácil descifrar el estilo de pelea de su rival. Y que, además, tendrá de frente a una fiera humana.

 E incluso expertos señalan que el estadounidense nacido en Los Angeles, ganador de tres coronas mundiales en otras tantas categorías, podría estarse jugando su futuro en las 16 cuerdas.

 Porque, precisan, si cae ante Cotto es probable que no regrese a los cuadriláteros e irse al retiro con fama y dinero.

 En declaraciones ofrecidas el pasado domingo al diario Primera Hora, de Puerto Rico, Mosley se mostró optimista ante el pleito que protagonizará con el neto pegador boricua.

 “Estoy motivado y emocionado por pelear con Cotto. Será una pelea emocionate”, según Mosley quien respondió preguntas del reportero Carlos González.

Cotto está en un gran momento

Miguel Cotto, quien también fue un exitoso monarca mundial welter júnior (defendió seis veces esa corona), vive su mejor momento en el rudo deporte de los puños enguantados.

La prensa especializada lo calfica como «el futuro mejor boxeador puertorriqueño de todos los tiempos, si sigue trillando el camino de la estelaridad, por encima del gran Wilfredo Gómez y de Félix -Tito- Trinidad quien por tercera vez decidió regresar al boxeo activo.

 En su pelea con Mosley, dicen expertos, Cotto subirá al ring -como es su costumbre- en plenitud de condiciones físicas y nadie debe dudar que termine las acciones antes de los 12 rounds.

 Mosley, de su lado, no quiso pactar, como pensaban sus admiradores, una pelea con  Floyd Mayweather (Jr), ex campeón welter y actualmente titular mediano júnior del Consejo Mundial de Boxeo (CMB) después de su cuestionada victoria, el pasado cinco de mayo, ante Oscar de la Hoya.

 Mayweather,  el ocho de diciembre, defenderá el cinturón cemebeísta de las 154 libras cuando cruce guantes con el británico Ricky Hatton quien no ha probado el amargo de la derrota en 43 peleas profesionales. Los analistas dan cuenta de que Cotto, conquistar de la faja welter cuando fue a una pelea eliminatoria con su paisano zurdo Carlos Quintana,  con sus treinta victorias (25 nocauts), figura en una élite en el boxeo mundial…¡y algunos afirman que debe ya ser considerado como «el mejor boxeador del mundo kilo por kilo, por encima de Floyd Mayweather». Mosley, quien trabajó durante dos meses como «sparring» de Oscar de la Hoya, en el período en que éste se preparaba para su pleito con Mayweather, presenta expediente de 44-4 ( 37 victorias por nocaut).

Dos de sus fracasos se los asestó Vernon Forrest, pero también en su foja figuran dos triunfos -anque uno de ellos mostrenco- ante De la Hoya a quien en junio del 2000 le arrebató el cetro welter del CMB.

Cuando inicie el mes de septiembre tanto Cotto como Mosley comenzarán sus labores de entrenamiento y a partir de ese momento el mundo del boxeo estará pendiente de cada respiro de estos dos estelares pugilistas del pugilismo moderno.

 Pero la vendad es que el puertorriqueño se verá frente a una gran prueba, una de las más dificiles de su carrera profesional.  Cotto se mantiene invicto y su registro estará en juego ante Mosley.