En el arte, las esculturas son piezas con mayor fuerza. Grandes, pequeñas y tridimensionales estas obras pueden lucir en el interior de una casa al igual que en los exteriores: en los parques, en las avenidas de las ciudades y en las aceras. Aquellas de tamaño monumental como las de los escultures, Eduardo Chillida o Auguste Rodin, por lo general son instaladas en lugares públicos para que todos puedan disfrutar de las obras. También algunos museos como el Museo de Arte Metropolitano de Nueva York, tienen jardines creados únicamente para exhibir obras tridimensionales_pero uno de los jardines de esculturas más impresionantes que ha recibido aclamación crítica es el Jardín de Esculturas de Donald M. Kendall en las oficinas principales de PepsiCo en Purchase, N.Y.
Aproximadamente a dos horas en carro de Manhattan la PepsiCo abre sus puertas todos los días a todo aquel que quiera visitar sus majestuosos jardines. Al entrar es como visitar los grandes palacios de la zona del Loire en Francia: el edificio grandioso en su modernidad contrasta con las gigantescas esculturas y el verdor de la naturaleza. La propiedad de 160 acres tiene aproximadamente 40 esculturas de artistas como George Rickey, Joan Miró, Richard Erdman, Auguste Rodin, Isamu Noguchi, Louise Nevelson, George Segal, entre otros.
Cada escultura está en un lugar diferente del jardín. Pero todas están separadas por el amplio terreno, el césped, los árboles y los arbustos. Visitar cada pieza en su espacio privado es tener una relación especial con ella. En el silencio de la naturaleza, alejado de la realidad uno se enfrenta con esculturas de grandes maestros que sobresalen del ambiente e imponen su presencia. Estas no se pueden tocar pero uno se puede acercar a ellas para observar de cerca cada detalle de las obras y así sentir la mano del artista.
Existe un paseo que rodea el jardín y este está dividido en varios caminos dirigidos hacia las esculturas. Tomar todas las vías es parte importante del viaje. En el más largo uno se da una idea del terreno y tiene diferentes perspectivas de las esculturas. Uno las ve de lejos contrastadas con el resto del jardín y el resto de las piezas. Pero en los más cortos uno se puede acercar y verlas desde otra perspectiva; así uno ve el majestuoso tamaño y siente la grandeza de estas obras.
El Jardín de Esculturas de Donald M. Kendall de la PepsiCo es un homenaje a las esculturasuno de los más impresionantes jardines en donde cada temporada las obras sobresaltan de su ambiente ya sea contrastando con las flores de la primavera, la nieve del invierno, el follaje del otoño o el verdor del verano.