Sabe más que el lápiz. Sin duda es una frase que has oído a menudo, pero en realidad eso es una metáfora, porque ese sencillo instrumento, con el que escribes y dibujas, no sabe nada, pero con él se pueden plasmar todos los conocimientos del mundo.
Pues has de saber que el lápiz tuvo su origen en Inglaterra, en el año 1564, cuando fue descubierto el grafito.
Se cuenta que una tarde del año 1564 una fuerte tempestad derribó un enorme árbol cerca del poblado de Borrowdale, en Cumberland, Inglaterra y que debajo del sitio donde habían estado sus raíces apareció una sustancia negra de aspecto mineral hasta entonces desconocida, era una veta de plombagina o plomo negro, y se trató el grafito mas grande aparecido en el mundo.
Primero los pastores usaron ese material para marcar sus ovejas, pero no era resistente y tuvieron que ingeniárselas para ir resolviendo ese problema. Luego empezaron a darle otros usos y a perfeccionar los procedimientos añadiéndole otras sustancias, como el polvo y la arcilla.
En el año 1795 se produjo por primera vez lápices hechos de grafito, previamente molido con ciertos tipos de arcilla, prensado en barras que se horneaban en recipientes de cerámica. Por último, se rodeaban de madera de cedro. Pronto se impusieron en todo el mundo.
En 1812 en ebanista e inventor William Monroe, de Conconrd, Massachusetts, fabricó unas máquinas que producían estrechas tablitas cilíndricas de madera que median entre 16 y 18 cms. A lo largo de cada una el aparato producía estrías justo en la mitad d el grosor del semicilindro, a continuación se la unían con cola las dos secciones de la madera y se pegaban en torno al grafito. Así nació el lápiz tal y como lo conocemos actualmente.
La dureza de los lápices depende de la proporción entre grafito, que es una variedad del carbono y la arcilla: cuanto más grafito se utilice, más blando u oscuro es el trazo que se hace con el lápiz.
El lápiz de color, que tanto usas en la escuela y en hogar, se hace con un grafito del mismo color que la cubierta de madera.
Los lápices tienen diferentes formas: los hay triangular, rectangular, hexagonal, redondeados, etc.
También de acuerdo a su uso, pueden ser de grafito, que son los más comunes; lápices de carbón de leña, que lo usan los dibujantes; lápices de crayón, a los que junto con el grafito se le añade cera y otros aditivos; lápices de grasa, que son conocidos como marcadores; lápices de acuarela, que utilizan los que trabajan con ese material como complemento para tirar líneas agudas y en negrillas;
También hay lápices de copiado, que tienen un tinte agregado al grafito que crean una marca indeleble; lápices de carpintería, cuya mina es fuerte; lápices borrables, lo usan los dibujantes y pintores para hacer los bosquejos de sus obras; los portaminas, para trabajos mecánicos y de ingeniería y los lápices de golf, que se usan en las bibliotecas como instrumentos de escritura desechable.
Fue John Eberhard, construyó la primera fábrica y a partir de las últimas décadas del siglo XX, Brasil es el mayor productor de lápices del mundo.