El Louvre en Santo Domingo

El Louvre en Santo Domingo

LOURDES CAMILO DE CUELLO
Sólo agradecimientos.

Permítanme darles las gracias, a nombre del Secretario de Estado de Cultura, Lic. José Rafael Lantigua, a todos los que han hecho posible que por primera vez el gran Museo del Louvre se proyecte con una selección de sus muy importantes obras en nuestro país; que también lo haga por primera vez en un país latinoamericano; pero más aún, por primera vez en el mundo, sin poner en riesgo sus valiosas colecciones.

Y es un privilegio para Santo Domingo de Guzmán, ciudad primada del nuevo mundo, por donde entró la civilización europea al nuevo continente. recibir la exposición Imágenes del Louvre: seis siglos de pintura europea, a través de la reproducción.

Imágenes del Louvre: seis siglos de pintura europea es una muestra exquisitamente seleccionada de las obras maestras que atesora el respetable museo francés, y que supone un recorrido por las diferentes escuelas que se impusieron en el contexto del arte occidental e hicieron aportes muy valiosos a través de sus grandes figuras desde el siglo XIII hasta el siglo XIX.

Particularmente es doble el agradecimiento a la Embajada de Francia en República Dominicana pues en 2005, con la espectacular exposición fotográfica de Jean Arthus Bertrand, La Tierra vista desde el cielo, el parque Independencia, además del carácter solemne y patriótico que posee, se confirma como la gran sala de exposiciones de la capital dominicana, derribando el absurdo de un parque cercado para convertirse en un muro cultural que permite la aproximación del ciudadano de a pie al arte, a la cultura, al hecho histórico por medio de la gráfica de gran tamaño.

En las estructuras del parque Independencia, donadas anteriormente por la Embajada de Francia, se han sucedido notables exposiciones de temática variada: las imágenes del Padre de la Patria, de la Revolución de Abril de l965, de la 1ra. Invasión Norteamérica de 1916, la exposición de Fotografías de las capitales europeas, los Paisajes del mundo captados por César Fernández y los Rostros de las mujeres dominicanas.

Valdría preguntarse si en estos tiempos de grandes avances tecnológicos, la labor de los museos como salvaguardas de la memoria de los pueblos cumple plenamente su misión divulgadora. Habría entonces que reconocer nuevas formas de acercamiento a las personas sencillas, a aquellas que no han tenido acceso a los mismos, que no han sido favorecidos ni con el conocimiento del arte, y ni siquiera con su aproximación a él.

Las exposiciones reiteradas en el parque Independencia han creado un incentivo en los artistas del lente que ven este escenario como el más apreciado lugar de exposición en toda la república.

Es estímulo, también, para el desarrollo de las industrias de artes visuales cuya tecnología se renueva a cada minuto entregándonos la calidad que hoy apreciamos en esta singular muestra.

Al presentar esta propuesta, a la par artística como didáctica, es el deseo de la Secretaría de Estado de Cultura que los profesores de todos los colegios y escuelas del país la conozcan y se acompañen de sus alumnos y alumnas. Que todos los centros educativos poseedores de equipos electrónicos, motivados por esta selección del Louvre, accedan a su página Web y conozcan otras producciones de esos mismos pintores y otros exponentes de las distintas escuelas. Enseñar y conocer el arte no debe ser sólo para aquellos que se especializan en las bellas artes. Cuando transmitimos los conocimientos a todos por igual, ejercemos la equidad.

Cabe destacar que el Gran Teatro del Cibao será anfitrión de esta magnífica muestra, este mismo año, desde donde partirá a todo el mundo.

Reiteramos nuestros agradecimientos a la Embajada de Francia en nuestro país en la persona de su embajadora, la Excelentísima señora Cecile Pozzo di Borgo, y a todo su equipo de trabajo. Al Museo del Louvre, en la persona de su Presidente y director general, Henry Loyrete; a Marie Catherine Sahut, conservadora en jefe del Departamento de Pinturas del Louvre y curadora de la exposición. Al departamento de fotografía de ese mismo museo.

Nuestro reconocimiento a una mujer francodominicana, directora del Centro Cultural Cariforo, organizadora de esta importante muestra; trabajadora ejemplar que nunca ha dudado en ayudar, promover y conjugar sus mejores esfuerzos para que los dominicanos nos beneficiemos de sus iniciativas. Gracias, doña Marianne de Tolentino.

Asimismo a la directora de Gestión de Patrimonio Cultural de la Secretaría de Estado de Cultura, Lic. María Isabel Martínez.

Al arquitecto Fernando Ottenwalder, museógrafo de la exposición. También a Miguel Peralta, notable artista de la impresión.

Gracias a las instituciones que han respaldado tan importante proyecto.

Saludamos la iniciativa de la embajada de Francia como signo esperanzador de nuevas colaboraciones culturales.

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