La imagen es la carta de presentación de su fortaleza. La imagen parte del criterio de que la apariencia es la realidad: “Usted es lo que aparenta que es, no lo que es en su esencia”. Sepa interpretar esto, no caiga en una apariencia excesiva, pero tampoco la ignore por completo.
Entienda que los demás no validan su persona, pero importa lo que piensan de usted. Por tanto, haga lo posible y lo necesario para que piensen lo mejor. Cuidado con dejar de vivir por el qué dirán, pero también, mucho cuidado, en asumir una vida enmarcada en malos pasos que dan mucho que decir.
En resumen, no sea infeliz por temor a las críticas, pero tampoco, sea un sinvergüenza que nada le importa, ni le preocupa.
Construya un buen nombre. Es importante crear una imagen auténtica que responda a su vida real y a los dictámenes de su yo interior. Vele por su buen nombre, sea honrado, evite cometer actos que dañen su buena reputación. “Estoy convencido de que hay pocas cosas importantes como el buen nombre” reflexiona Robin Sharma.
Evite ser un interlocutor de la apariencia. La imagen auténtica se logra cuando usted se presenta ante los demás en función de lo que es, y no de la forma que usted quiere que ellos lo perciban.
Xavier Soler razona que el interlocutor de la apariencia se muestra muy sensible a las modas, a las tendencias y al estatus social… Le gusta la belleza y la plástica, cultiva su imagen social y su apariencia física. Amante de exhibicionismo, de representar papeles, se muestra divertido, alegre, incluso superficial. Las expresiones, look, fashion victim, tendencia, formas, diseño, estética y espectáculo forman parte de su vocabulario habitual.”
Entienda que para los medios de comunicación la apariencia es muy importante, y, por tanto, desde el comienzo procure proyectar su apariencia en su realidad, y esto les servirá para construir una imagen sobre “concreto duro”.
Cada día está más de moda en los artistas y actores llamar la atención mostrándose “raro”. Esa es una forma eficaz de llamar la atención y hacerse visible.
Entienda que al ser humano cada día es más difícil atraerlo por la apariencia o por una conducta y comunicación simulada. Las personas construyen vínculos de confianza descifrando las buenas intenciones del emisor. Las personas están mirando con un ojo crítico y van aprendiendo a valorar por lo que son sin dejarse llevar por prejuicios antes determinadas apariencias. Saben que la mayoría de las veces las personas no son como se muestran en público.
Tenga en cuenta que a los medios de comunicación les gusta siempre encontrar algo diferente. Evite la forma de caer en su superficialidad, ya que la imagen de la persona no es valorada sólo en función del aspecto físico: cuerpo, ropa y cara. En la construcción de la imagen el aspecto psicológico: confianza en sí mismo, seguridad que irradia, compostura, forma de caminar y hablar, juegan un rol importante.
Busque la forma de que su persona encarne una diferencia.
El marketing personal se basa principalmente en la imagen de la persona. Se enfoca tanto en la imagen interna como externa, con el objetivo de convertirse en una persona triunfadora, pero a la vez, con armonía en sus imágenes interna y externa.