El Ministerio Público está obligado a rendir cuentas y mostrar transparencia a población

El Ministerio Público está obligado a rendir cuentas y mostrar transparencia a población

POR LLENNIS JIMÉNEZ
El procurador general, Radhamés Jiménez Peña, advirtió que el Ministerio Público  está obligado a transparentar sus actuaciones con rendiciones de cuentas, que implican al mismo tiempo ofrecer mecanismos prácticos  de acceso a  la ciudadanía, para que pueda indagar y evaluar su desempeño.

Afirmó que la Procuraduría fue la primera institución del Estado en crear una Oficina de Libre Acceso a la Información Pública  (OAIP) y en tener un Piloto de Transparencia (PT).

Dijo que estos procesos de transparencia no se hicieron por casualidad, sino a los fines  de ofrecerle a la ciudadanía un modelo de gestión relativo al trabajo que se hace en el Ministerio Público, en lo relativo al  régimen de compras, contrataciones  de bienes y servicios, obras y lo atinente a las áreas administrativa y financiera.

El magistrado Jiménez Peña defendió las acciones del órgano del Estado encargado de las actuaciones legales durante el acto de relanzamiento de la revista “Ministerio Público”, en presencia de fiscales, abogados, estudiantes de Derecho y otros actores del sistema de justicia.

Este medio de comunicación, dijo, retorna su labor para indagar y evaluar el desempeño del Ministerio Público, como institución responsable que es de velar por el cumplimiento de la ley y de asistir a la población en los variados servicios que le ofrece.

La actividad fue realizada en el Auditorio de la Procuraduría. Reportajes, artículos noticiosos, de opinión y temáticos, son algunas de los géneros en que llegarán las publicaciones, que en esta entrega destaca los avances de la Carrera del Ministerio Público, la labor de transparencia en la Procuraduría General de la República, el Nuevo Modelo Penitenciario y el Modelo de Gestión de Fiscalía como parte esencial del proyecto Justicia XXI. 

En su discurso, Jiménez Peña indicó que este órgano de difusión resulta vital para toda institución que procure participar con éxito en el escrutinio público y el debate, de cara a los desafíos del actual mundo globalizado.

“En lo adelante, esta revista deberá constituirse en órgano de divulgación del día a día, y a la vez, en medio de formación para  los actores del Ministerio Público, en su estrecha relación con el  Sistema Nacional de Justicia, y sobre todo, con la sociedad a la que se debe y sirve», precisó el magistrado.

Recordó que el primer órgano de este género que tuvo la Procuraduría General de la República fue en los años 30 del siglo pasado, en plena tiranía trujillista, cuando circuló la Revista Jurídica Dominicana, de salida trimestral.

La revista fue publicada hasta el primer centenario de la República en 1944 y la función de director la ejercía el propio Procurador General de la República, quien sin revelar su nombre figuraba en una rústica mancheta.

Entre sus colaboradores, mencionó Jiménez Peña, figuraban Alvaro A. Arvelo, abogado ayudante del Procurador; Gustavo A. Díaz, juez de la Suprema Corte de Justicia; el criminalista español Constancio Bernardo del Quiros, y el más tarde asesinado por la propia tiranía, Jesús de Galíndez.

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