El mundo de los marcapasos

El mundo de los marcapasos

POR JOSÉ PIMENTEL MUÑOZ
Las personas que tienen marcapasos deben tener la precaución de usar los teléfonos celulares del lado contrario donde tienen instalado el dispositivo electrónico que ayuda a mantener normal la frecuencia del corazón. Pueden también usar un audífono que les permita mantener el celular a 12 pulgadas de distancia del punto donde está insertado el equipo, del tamaño de un reloj de pulsera.

Asimismo, todo el que tiene un marcapasos debe saber que no debe olvidar acudir semestral o anualmente al chequeo médico en que se comprueba el funcionamiento del dispositivo, especialmente la carga de las baterías.

Las recomendaciones son del doctor Efraín González, cardiólogo electrofisiólogo de Miami, quien habló en Santo Domingo de las novedades de los marcapasos, que han estado presentes en el campo de la medicina en los últimos 40 años y hoy en día no solamente sirven para mantener una estabilidad en la frecuencia cardíaca sino para dar tratamiento activo en los casos de ciertas arritmias.

González es jefe de electrofisología del Baptist Cardiac and Vascular Institute (Instituto Cardíaco y Vascular Baptist, que funciona en el Baptist Hospital, de Miami), uno de los centros donde más se trabaja con marcapasos y desfibriladores en el Sur de La Florida y que recibe buena cantidad de pacientes latinoamericanos que van a tratar problemas eléctricos y hemodinámicos del corazón.

Conversar con él permite entrar rápida y fácilmente en el fascinante mundo de los marcapasos, que usan personas de todas las edades. Entre las cosas que resalta está el desarrollo reciente de nuevos tipos que se denominan bi-ventriculares y tri-camerales y son útiles para pacientes con falla del corazón, es decir con el músculo cardíaco debilitado, aún cuando no hayan sufrido infarto coronario.

También pone de relieve que se ha incrementado la longevidad de las baterías de los marcapasos (de manera que pueden durar cinco, seis y hasta siete años después de la instalación inicial) y que las compañías fabricantes están tratando de producir dispositivos que no sean afectados por los equipos de resonancia magnética y de rayos x que se necesitan emplear para diagnósticos en pacientes con marcapasos.

Asimismo destaca que se trabajan  en la búsqueda de nuevas aplicaciones a los marcapasos e incluso se producen equipos de menor tamaño que se instalan a niños que todavía están en el vientre de la madre y que han sido diagnosticados con problemas desde antes de nacer.

PRECAUCIONES

“Con los avances tecnológicos, los marcapasos artificiales actuales duran generalmente de ocho a diez años (dependiendo del tipo de enfermedad cardiaca) y, en la mayoría de los casos, permiten que el paciente lleve una vida normal. Además, con los avances en los sistemas de circuitos de los marcapasos, se ha reducido el riesgo de interferencias de ciertos aparatos, como por ejemplo los microondas y los detectores de seguridad de los aeropuertos, que en el pasado podían alterar o afectar de alguna forma a los marcapasos”, dice González.

Sin embargo, es necesario tomar ciertas precauciones cuando una persona tiene un marcapasos artificial”, explicó González, quien puso el correo electrónico International@baptisthealth.net a disposición de las personas que deseen formular preguntas sobre el tema.

Por ejemplo, se sugiere tener cuidado cuando se pase por los detectores de seguridad de los aeropuertos y que el portador del dispositivo pregunte a su médico si es seguro pasar por dichos detectores con su tipo específico de marcapasos.

Además, evitar los aparatos de imagen por resonancia magnética (su sigla en inglés es MRI) u otros campos magnéticos grandes. Asimismo, se insta a abstenerse de la diatermia (utilización de calor en fisioterapia para tratar los músculos) y a apagar los motores grandes, como los de los automóviles o los barcos, si está trabajando en ellos (estos pueden “confundir” temporalmente el ritmo de su marcapasos).

El Instituto Cardiaco y Vascular del Baptist Hospital, de Miami exhorta a evitar los cables de alta tensión, las instalaciones de radar o los hornos de fundición. Indica que si un dentista o un cirujano va a someterlo a un procedimiento quirúrgico, el paciente debe decirle que lleva un marcapasos, ya que de esta forma no se utilizará la electrocoagulación para controlar las hemorragias (el aparato de electrocoagulación puede cambiar la programación del marcapasos).

¿QUÉ ES?

Es un aparato pequeño que se implanta bajo la piel (la zona más frecuente es la del hombro, justo por debajo de la clavícula) y que envía señales eléctricas para iniciar o regular un latido lento del corazón. Un marcapasos permanente se puede utilizar para hacer que el corazón lata si su marcapasos natural (el nódulo sinoatrial del corazón) no funciona correctamente y ha desarrollado una frecuencia o un ritmo cardiaco anormales o si las vías de conducción eléctrica están bloqueadas.

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