EU descarta invasión Cuba

EU descarta invasión Cuba
LA HABANA (AFP).- Estados Unidos no tiene intención de invadir militarmente a Cuba ni de provocar una crisis migratoria, prueba de lo cual es que ya en julio actual cumplió su cuota anual de entrega de 20.000 visas, aseguró este miércoles su Sección de Intereses (SINA) en La Habana.
«El Gobierno de los Estados Unidos no tiene intención alguna de invadir Cuba, ni de apoyar ninguna acción militar o violenta tendiente a derrocar el estado policíaco cubano», dijo una declaración de prensa escrita, distribuida al término de una conferencia de prensa del jefe de la Sina, James Cason.
El texto añadió que Washington sólo desea «la transición rápida y pacífica a una Cuba democrática orientada hacia la economía de mercado».
Cuba y Estados Unidos suscribieron en septiembre de 1994 y mayo de 1995 acuerdos migratorios, los únicos en vigor entre los dos países, para buscar una emigración ordenada y segura desde a isla.
En esos textos, Estados Unidos se comprometió a otorgar un mínimo de 20.000 visas anuales y repatriar a los ilegales interceptados en alta mar o en la norteamericana base naval de Guanántamo.
La Habana, por su parte, asumió desalentar las salidas ilegales por medios persuasivos y reinsertar socialmente a los devueltos, sin consecuencias legales por esos hechos.
Desde 1994, más de 250.000 cubanos han recibido visas para viajar.
La Sina anunció que hasta el 16 de julio actual, «ha expedido a los ciudadanos cubanos los 20.000 documentos de viaje correspondiente a este año fiscal (que vence el 31 de septiembre), cumpliendo así con su compromiso anual».
«Este logro, nunca antes alcanzado tan tempranamente en un año fiscal, subraya nuestra voluntad manifiesta de alentar una emigración segura, legal y ordenada», añadió la declaración.
Por su parte, Cason estimó que de parte de Washington no hay percepción de que pueda ocurrir una nueva crisis migratoria, pues «son estimuladas por el Gobierno (cubano) no son espontáneas».
«No creo que hay ninguna razón de parte del Gobierno para estimular una nueva crisis migratoria», dijo Cason, y añadió que «nosotros haríamos todo lo posible por pararla, no hay dudas de eso».
El funcionario explicó que su Gobierno decidió suprimir los encuentros semestrales para revisar los acuerdos, hasta que la parte cubana esté dispuesta a analizar seriamente cinco puntos pendientes.
Ellos son: que se le permita a los funcionarios norteamericanos verificar la reinserción social de los repatriados fuera de La Habana. Desde hace mas de un año, La Habana limitó la movilidad de los diplomáticos norteamericanos.
Washington también solicita un puerto de mayor calado que el de Cabañas (oeste), por donde se realizan las repatriaciones actualmente, así como que Cuba acepte la devolución de «excluibles», emigrantes cubanos que han cometido hechos criminales.
Igualmente piden que sea extendido el permiso de salida a todos los cubanos a quienes se ha extendido visas, pues 1.352 de ellos no la recibieron, el 80% por trabajar en el sector de la salud, básicamente.
Por último, Estados Unidos pide la realización de una nueva lotería migratoria, pues actualmente trabaja con la de 1998, que es la tercera. (Las anteriores fueron en 1994 y 1996).
Según explicó, en 1998 muchos jóvenes que en la actualidad tienen 24 ó 25 años, no habían cumplido los 18, edad requerida para emigrar, por lo que carecen en la actualidad de la posibilidad legal de hacerlo.
Cason añadió que la mayoría de los repatriados actualmente, tras ser interceptados en el mar, son jóvenes de esas edades, o profesionales de la salud, que no reciben permiso cubano.