JUAN FRANCISCO MONCLÚS
Hoy insistimos una vez más, en lo útil que sería que las autoridades de los ayuntamientos o cualquier institución que tenga competencia en la rotulación e identificación de las calles y avenidas de esta ciudad puedan hacerlo, orientar debidamente al ciudadano, señalando las fechas históricas, geográficas, mencionando a países amigos; así como los nombres de las personalidades nacionales y extranjeras de altos merecimientos.

Desde hace algún tiempo, esas autoridades se vienen abocando a mejorar la imagen de sus instituciones, diseñando lo que unos han llamado «una ciudad posible», por lo que ponerles nombres a las vías públicas capitaleñas, rotular a las que carecen de reconocimientos y presentar ayuntamientos más dinámicos es una noble preocupación. Sin embargo, es fácil notar algunas lagunas en esas rotulaciones; en efecto, el nacional y sobre todo el extranjero, se sienten confundidos al encontrar nombres de calles y avenidas tales como Av. Independencia, ave. Duarte, calle José Gabriel García, ave. Bolívar, y así por el estilo.

Como se ve, no se le ofrece al atolondrado transeúnte ningún dato concreto para que pueda identificar la fecha, acontecimiento o personaje que se pretende recordar; no existe en el señalamiento de marras ninguna voluntad pedagógica de parte de las autoridades que nos ocupan.

Esas lagunas pueden evitarse al identificar las vías, no solo con el acontecimiento histórico o la persona exaltada, sino también encerrar entre paréntesis o guión, en la misma chapa, la fecha del suceso, el año del nacimiento y fallecimiento, así como las actividades desarrolladas por personaje, ejemplo: ave. Independencia (27/02/1844, Independencia Nacional); ave. Juan Pablo Duarte (1813-1876, Padre de la Patria dominicana); calle José Gabriel García (1834-1910, historiador dominicano); ave. Simón Bolívar (1783-1830 Libertador venezolano), de este modo nos ilustramos leyendo el nombre de nuestras calles y avenidas.