Hoy 
POR JUAN M. RAMIREZ
El padre Avelino Fernández continúa en proceso de recuperación, por lo que ayer era sometido a terapias y ejercicios, informó el hospital Plaza de la Salud, donde se encuentra internado el religioso.
Según el parte médico el padre Fernández se recupera satisfactoriamente en el centro asistencial donde en los últimos días ha recibido visitas, aunque restringidas, para evitar que converse lo menos posible y descanse lo suficiente.
El padre Fernández expresó que se siente bien y que su recuperación marcha favorablemente, por lo que confía salir pronto del hospital e irse a descansar a su casa.
Mostró su deseo de ir a la playa cuando salga del centro asistencial y compartir con su gente del Sur, quienes han orado para que el Todopoderoso intervenga por su salud.
El padre Avelino fue párroco durante muchos años de la iglesia Nuestra Señora de La Altagracia, de Pedernales y sirvió además en Oviedo, Enriquillo, Barahona y Vicente Noble.
La semana pasada el padre Avelino Fernández fue trasladado a una sala de la Plaza de la Salud, luego de permanecer varios días en el área de Cuidados Intensivos, donde estuvo en estado de coma.
El padre, quien es además comentarista de televisión, fue ingresado a la Plaza de la Salud el lunes 18 de junio después de que varios vecinos lo hallaron inconsciente en su apartamento, ubicado en el residencial José Contreras.
En el centro de salud se determinó que el sacerdote sufrió un accidente cerebro-vascular y que padece de insuficiencia cardíaca, sangrado intestinal y tenía las vías pulmonares obstruidas a causa de una bronconeumonía.
Entre las visitas que ha recibido el padre Avelino está la del cardenal Nicolás de Jesús López Rodríguez y ayer recibió la del secretario de Salud Pública, y otras personalidades.
Avelino es atendido por los doctores Nepomuceno Mejía, director médico, y Dolly Mejía, jefa de medicina interna, entre otros médicos.
Los médicos expresaron que el paciente ha continuado el proceso de mejoría en su estado de salud.
El padre Avelino Fernández es considerado como uno de los sacerdotes más carismáticos en la región Sur del país, donde ha desarrollado una labor pastoral y de acompañamiento a los pobres extraordinaria.
En sus comentarios es crítico contra las prácticas inmorales.
