Hoy 
«El país aspira y espera reafirmar su vocación democrática con elecciones limpias y transparentes en mayo del 2004, en las que el candidato elegido sea representante genuino de la voluntad popular», dijo ayer Niky Fabiancic, representante del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) y del Fondo de Población de la misma entidad (UNFPA).
Al exponer en el inicio del Ciclo de Conferencias Magistrales sobre los Objetivos del Milenio, que organiza el Congreso Nacional, Fabiancic sostuvo que el país aspira y espera reafirmar su vocación democrática, consolidando una justicia independiente y el imperio de la ley y el estado de derecho.
Añadió que el país aspira y espera reafirmar su vocación democrática modernizando sus instituciones para servir al ciudadano con eficiencia y transparencia, creando empleos, apoyando el desarrollo del empresariado nacional, brindando servicios de salud adecuados y mejorando la calidad de la educación.
Durante la jornada celebrada en el salón de la Asamblea Nacional, el funcionario de la ONU reclamó asimismo el fortalecimiento del Congreso de manera que apruebe leyes muy esperadas.
Citó entre éstas la de carrera civil administrativa, de reforma tributaria, la reforma del funcionamiento de las asociaciones sin fines de lucro, de compras del Estado y la ley de migraciones
«El país aspira y espera reafirmar su vocación democrática, revitalizando el «Diálogo Nacional» para que se puedan debatir con altura en sus mesas de trabajo los grandes problemas nacionales y se encuentren los acuerdos que ayuden a pacificar la nación», dijo.
Fabiancic reclamó también que las recomendaciones de la comisión de seguimiento del Diálogo Nacional sean debidamente tomadas en cuenta.
Expresó que el país también espera que el endeudamiento con el Fondo Monetario Internacional (FMI), el Banco Mundial y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), sea utilizado sabiamente por este gobierno y el que sea electo en mayo, para relanzar la República con un modelo de desarrollo sustentable.
Al efecto, sostuvo, debe aprovecharse la «envidiable» situación geográfica, turística y de bienes y servicios de exportación para que así se generen las condiciones de crecimiento que le permitan al país crear los recursos necesarios para pagar estas deudas «sin hipotecar el futuro de la próxima generación».
Fabiancic significó que el país espera y aspira vivir con alegría y sin apagones, sin una canasta familiar inalcanzable, con trabajo y dignidad.
Añadió que el país desea seguir gozando de su libertad y seguridad ciudadanas.
«Creemos que no se trata de echarle la culpa a gobiernos presentes o pasados, ni de darle méritos o atacarlos, sino que es la hora de buscar salidas entre todos a una situación difícil», dijo.
«Y en esto -sostuvo-, los partidos políticos a través de sus candidatos tienen la gran responsabilidad de presentar propuestas serias. Y los ciudadanos tienen el deber y el derecho de elegir la mejor entre todas ellas.»
El representante de la ONU dijo que los objetivos de desarrollo de este milenio son un instrumento muy poderoso para ayudar a organizar un debate serio entre las diversas fuerzas de la nación para ayudar a consensuar políticas de estado y para medir el progreso o retroceso del país.
Observó que son las decisiones que hoy se tomen para salir de esta crisis las que marcarán y tendrán un efecto en la obtención de estos objetivos en el 2015.
En la jornada que abrieron con sendos discursos el presidente del Senado, Jesús Vásquez Martínez, y de la Cámara de Diputados, Alfredo Pacheco, el funcionario de la ONU citó entre los problemas más graves de aquí la crisis bancaria, energética y de los partidos políticos.
Manifestó que combinados, esos factores han producido un marcado deterioro de la economía dominicana.
Fabiancic significó que esa situación ha creado intranquilidad, incertidumbre y nerviosismo en amplios sectores de la población, opacando incluso éxitos como la brillante celebración de los Juegos Panamericanos.
La ponencia de Fabiancic fue motivada por el senador Ramón Alburquerque. Igualmente, los senadores José Tomás Pérez y Mario Torres motivaron, respectivamente, la participación de Enrique Ganuza, economista del PNUD, y de Miguel Ceara Hatton, director de la Oficina de Desarrollo Humano.
La actividad se inició a las 3:15 de la tarde y concluyó dos horas después.
Asistieron, entre otros, el ex presidente Salvador Jorge Blanco y su esposa Asela Mera de Jorge; el presidente de la Suprema Corte de Justicia, doctor Jorge Subero Isa; Timothy Brogglio, nuncio de Su Santidad; Porfirio García Fernández, rector de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD) y el doctor Víctor Gómez Bergés.
Asimismo, el doctor Luis Arias, presidente de la Junta Central Electoral (JCE); monseñor Agripino Núñez Collado; Víctor Báez, director del Consejo Estatal del Azúcar (CEA); el embajador de Francia, señor Claude Moiret; Julio Suero Marranzini, director de la Corporación del Acueducto y Alcantarillado de Santo Domingo (CAASD).
