Los países que no son capaces de frenar la corrupción y establecer la transparencia difícilmente pueden avanzar, dicen los senadores Charlie Mariotti y Julio César Valentín.

Los países que no son capaces de frenar la corrupción y establecer la transparencia difícilmente pueden dar el salto hacia el desarrollo y el bienestar del pueblo, afirmó ayer el senador Charlie Mariotti, mientras su compañero de bloque Julio César Valentín recordó que para superar ese grave mal, las Naciones Unidas han venido promoviendo reglamentos y normas para prevenir, disuadir y sancionar a los funcionarios públicos que incurren en esos actos ilícitos.

Ambos, junto al también peledeísta Tommy Galán, de San Cristóbal, son los autores de los proyectos de leyes de Cámara de Cuentas, de Declaración Jurada, modificado por el Banco Mundial, el de Fiscalización y Control y el de Integridad en la Función Pública.

También los proyectos de leyes de Derecho de las Personas en los Procesos Administrativos, de Racionalización del Gasto Público y el que establece el Procedimiento para el Otorgamiento del Indulto.

 Mariotti, de Monte Plata, y Valentín, de Santiago, detallaron los alcances de esas iniciativas anticorrupción al participar en el Almuerzo del Grupo de Comunicaciones Corripio.

Mariotti, quien preside la comisión  de Industria y Comercio, dijo que esta cruzada se inscribe dentro de una especie de movimiento de la sociedad dominicana, que no es ajena a los acontecimientos que en contra de la corrupción  y a favor de la transparencia se registran en el mundo.

ONU.  Expresó que desde hace unos 16 años las Naciones Unidas viene promoviendo normas, procedimientos y reglamentos que establecen líneas de acción muy claras para prevenir, contener y disuadir a funcionarios -altos, medios y bajos-, no sólo públicos, sino también privados, del manejo doloso de recursos.

Precisó que estas acciones tienen que ver con corrupción, lavado de dinero y con el vínculo de la corrupción en los ámbitos público y privado con otros delitos y otras formas de delincuencia, a veces muy sofisticadas.

Bandera de lucha.     Mariotti consideró que se impone que el combate al manejo irregular de recursos del Estado y el enriquecimiento ilícito de funcionarios debe ser convertido en una bandera porque, en definitiva, sostuvo, “la corrupción es una devoradora de riqueza colectiva”.

Expresó que una persona puede hacerse rica mediante el dolo, el tráfico de influencia, prevaricando y el engaño y el soborno, pero la sociedad pierde recursos que pueden ser destinados a enfrentar problemas como la desigualdad, la pobreza, la inversión en políticas sociales para contribuir a elevar la calidad de vida de los gobernados.

Ofensiva legislativa.    Al intervenir, el senador Valentín, quien preside la comisión de Justicia, dijo que en este momento hay una especie de ofensiva legislativa en el Senado contra la corrupción, la cual, sostuvo, afecta la integridad y la legitimidad de las instituciones y actores públicos.

Significó que hay estudios concluyentes que revelan que las sociedades del mundo que presentan los mejores indicadores de desarrollo humano tienen los más bajos niveles de corrupción.

Consideró que el enfrentamiento de la corrupción no sólo debe ser atacado por la retórica y la sola actuación del Poder Ejecutivo, sino que hay que implicar a los demás poderes del Estado y a los actores sociales, como los medios de comunicación y las entidades de la sociedad civil.

Coincidió con Mariotti en el sentido de que la coyuntura es favorable  para impulsar la más ambiciosa ofensiva a favor de la transparencia y en contra de la corrupción.

Nepotismo.  Valentín dijo que el nepotismo está establecido como contrario al buen gobierno y a la transparencia, pero en República Dominicana no está tipificado como delito, por lo que debe ser sancionado.

Recordó que la Constitución prohibe a los alcaldes y ediles aumentarse los sueldos por vía administrativa y eso lo están haciendo muchos  a través de sus salas capitulares.

“Eso es inconstitucional, más no hay una sanción penal”, cosa que sí está establecida en los proyectos que ellos impulsan.

Valentín, al igual que Mariotti, dijo que el propósito de las leyes sobre Declaración Jurada de Patrimonio y el de Cámara de Cuentas es establecer un andamiaje de normativas para atrapar “al peje de la corrupción”.

El congresista dijo que si la corrupción es perniciosa, mucho más lo es la impunidad, porque ahí viene el desaliento, la desilusión y la pérdida  de fe de la ciudadanía en la democracia y sus instituciones.

Hace “mea culpa” por impunidad en RD

El senador Charlie Mariotti dijo que la impunidad es la máxima y, por no haberla contenido a tiempo, “tenemos que hacer un mea culpa y rasgarnos las vestiduras” e iniciar las acciones procedentes contra ese mal.

Expresó que   el régimen de consecuencias, como tal, no opera porque  ha sido superineficiente”.

Manifestó  que en este caso se cumple el dicho de que “esos vientos trajeron estos lodos”, como son la corrupción y el enriquecimiento ilícito.

Dijo que  la sociedad se encuentra  en el momento en que hay que establecer un antes y un después.

“Yo creo que la rabia pública, el descontento y el desencanto  en algún momento buscarán vías no necesariamente pacíficas”, dijo el congresista.

Advirtió que la reacción del pueblo no necesariamente será de  disturbios y protestas por la impunidad, sino “en términos inclusive de violencia antidemocrática.