El Palacio Consistorial de Santiago posee ornamentaciones  que lo hacen inigualable

El Palacio Consistorial de Santiago posee ornamentaciones  que lo hacen inigualable

Santiago, “Ciudad Corazón” del Cibao, que es el primer Santiago  de América, conserva curiosos lugares y edificaciones cuyas estructuras presentan algunas formaciones  con ornamentaciones inigualables.

Una de ellas es el Palacio Consistorial, construido entre los años 1895 y 1896, el cual está situado en la vía Benito Monción esquina calle Del Sol en el tramo que corresponde al lateral sur del parque Duarte cuya superficie adoquinada para ambos locales solamente sirve de paseo peatonal.

Es un edificio de dos niveles, el primero interiormente con cuatro puertas y una fachada de curiosa formación: centralmente tiene otro cuerpo que sobresale dos metros y medio hacia delante, y allí este primer nivel presenta una galería abierta en un cuerpo formado por una pared que tiene  una hilera de largos bloques lisos colocados horizontalmente uno sobre otro como si fueran ladrillos.

En ésta  se aprecian tres faroles, dos entradas enrejadas con una escalinata de cuatro peldaños de mármol crema y una ventana rectangular en cada lateral, como también en los dobleces de ambos recodos correspondientes al lado este y al oeste. También aparece otra entrada seguida por un par de ventanas, y allí, interiormente, hay cuatro puertas con arcos escarzanos.

Le continúa el segundo nivel con cuatro puertas, esta vez con arcos de medio punto, bordeadas con un marco de molduras dobles y un tragaluz de cristal.

Delante hay otra galería sin baranda ni abertura entre paredes, como la de abajo, solamente con cinco columnas góticas de cuerpos redondos de color bronceado, las cuales soportan un remate cuyo cuerpo frontal está formando una ancha curva con bordes formados por gruesas molduras paralelas que encierran un espacio, el cual al centro presenta un grandísimo “ojo de buey” bordeado y con rejas, o sea, una claraboya circular que antaño se utilizaba para dejar entrar el aire al interior. Esta claraboya está  rodeada por gruesas molduras formando un recuadro y fuera de ese marco, presenta -en ambos laterales- otras molduras que se enroscan y en la parte superior son pequeñas, pero en la inferior se amplían.

El techo semicircular tiene un borde sobresaliente debajo con una hilera de cortos soportes, el cual encima al medio presenta un corto soporte con una especie de  globo de concreto coronado por una veleta de esas que  en la época republicana se colocaban en lo alto de las torres para conocer la dirección del viento.

Adosadas a la pared del lado oeste se pueden observar tres especies de pilastras góticas. 

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