El papa expresa cercanía a damnificados por terremoto en el centro de Italia

El papa expresa cercanía a damnificados por terremoto en el centro de Italia

Papa Francisco. EFE.

 Ciudad del Vaticano.- El papa Francisco expresó hoy su cercanía a los damnificados por el terremoto de magnitud 6,5 en la escala de Richter que azotó esta mañana el centro de Italia, provocando decenas de heridos y graves daños materiales.

“Expreso mi cercanía a las poblaciones de la Italia central golpeadas por el terremoto. También esta mañana se ha registrado una fuerte sacudida”, señaló el pontífice tras el rezo del Ángelus, lo que arrancó el aplauso de los fieles en la plaza de San Pedro.

El papa oró “por los heridos y por las familias que han sufrido los mayores daños”, así como “por el personal involucrado en las labores de socorro y en la asistencia” a los damnificados. “Que el Señor les de fuerza y la Virgen les proteja”, apuntó.

El terremoto, de magnitud 6,5 en la escala de Richter, se registró en torno a las 7.40 hora local (una menos GMT) a unos diez kilómetros de profundidad y el epicentro se situó próximo a los municipios de Norcia, Castelsantangelo su Nera, Preci y Visso, en una zona montañosa entre las regiones de Umbria y Las Marcas.

De acuerdo al balance provisional, tras el movimiento telúrico se han registrado decenas de heridos, la mayoría leves, y por el momento no se han localizado víctimas mortales, aunque varias personas fueron rescatadas de entre los cascotes.

Una zona que ya registró una serie de terremotos el pasado miércoles, el mayor de 5,9 grados en la escala Richter, y que provocó numerosos daños materiales.

Los municipios afectados se encontraban prácticamente vacíos ya que su población había sido evacuada tras los terremotos registrados el pasado miércoles.

El pasado 24 de agosto otro terremoto de magnitud 6 causó la muerte de 297 personas y numerosos daños en municipios de Amatrice, Accumoli y Arquata del Tronto, muy próximos a las zonas afectadas en la última semana.

El 4 de octubre siguiente, el papa Francisco se trasladó por sorpresa a las localidades destrozadas por ese terremoto para rezar por los damnificados y confortar a niños y ancianos.