Ciudad del Vaticano. El papa Francisco manifestó su “profunda tristeza” y calificó de “violencia insensata y diabólica» el ataque contra una residencia de ancianos en la ciudad yemení de Aden en el que murieron cuatro Misioneras de la Caridad y otras 12 personas.
Según un mensaje de pésame emitido hoy y firmado por el secretario de Estado vaticano, Pietro Parolin, en nombre del papa, Francisco ha quedado “conmocionado y profundamente entristecido por la muerte de cuatro Misioneras de la Caridad y otras doce personas en una residencia de ancianos en Aden».
Asimismo, expresa su cercanía espiritual a las familias y a todos los afectados “de este acto de violencia sin sentido y diabólico». El papa asegura que rezará “para que esta masacre sin sentido despierte conciencias, dé lugar a un cambio en los corazones, e inspirar a todas las partes a deponer las armas y tomar el camino del diálogo».
Francisco hace un llamamiento a todas las partes en el conflicto actual “para que renuncien a la violencia y renueven su compromiso con la gente de Yemen, y en particular con los más necesitados». Asimismo, invoca “la bendición de Dios, y de manera especial a las Misioneras de la Caridad». El ataque se produjo ayer cuando un grupo de al menos cinco encapuchados irrumpieron en la residencia de ancianos y dispararon de forma indiscriminada una ráfaga de balas con fusiles automáticos.
Los fallecidos son el guardia de seguridad del asilo, once ancianos y cuatro misioneras de la Caridad, que trabajaban como enfermeras en este centro. El conflicto en el Yemen continúa después de que los bandos rivales concluyeran sus conversaciones de paz el pasado 20 de diciembre en Suiza sin llegar a un acuerdo para un alto el fuego permanente.