Ciudad del Vaticano, (EFE).- El papa Benedicto XVI pidió hoy a la sociedad y a las instituciones públicas que “reencuentren su alma, sus raíces espirituales y morales para dar más consistencia a los valores éticos».  

El papa teólogo subrayó además que el “debilitamiento en la percepción de los principios morales sobre los que se funda el derecho y en los comportamientos morales personales” agudiza el sentimiento de “inseguridad”, generado por los “profundos cambios» que marcan la época en la que vivimos.  

Unos cambios que, según recalcó el pontífice al recibir hoy en audiencia a los dirigentes y funcionarios de la policía de Roma, son debidos a la “precariedad social y económica».  

Benedicto XVI indicó que “los nuevos desafíos” a los que se enfrenta la sociedad “exigen” que “Dios y el hombre vuelvan a encontrarse” y que la sociedad y las instituciones públicas reencuentren su “alma, sus raíces espirituales y morales, para dar una nueva consistencia a los valores éticos y jurídicos de referencia y por tanto a la acción práctica».  

El pontífice consideró que “nuestro mundo, con todas sus nuevas esperanzas y posibilidades, está marcado, al mismo tiempo, por la impresión de que el consenso moral se desvalorice y que, en consecuencia, las estructuras en la base de la convivencia no consiguen funcionar de un modo pleno».  

De este modo, “nace en muchos la tentación de pensar que las fuerzas movilizadas para la defensa de la sociedad civil estén destinadas al fracaso».  

El papa subraya que “frente a esta tentación, los cristianos tienen la responsabilidad de reencontrar una nueva determinación en profesar la fe y en hacer el bien, para continuar con valor y estar cercanos a los hombres en sus alegrías y sufrimientos».   Las palabras del papa llegaron el mismo día en que el presidente de la Conferencia Episcopal Italiana (CEI), Angelo Bagnasco, anunció que el consejo permanente de esta institución, programado para el próximo lunes, abordará el último escándalo de índole sexual en el que se ha visto implicado el primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, el llamado caso Ruby.  

Un caso sobre el que el Vaticano ha manifestado, a través de su secretario de Estado, Tarcisio Bertone, que la Santa Sede sigue con “atención” y “preocupación” las informaciones que aparecen en los medios italianos.  

A este respecto, Bertone señaló ayer que la Iglesia invita a todo el mundo, “sobre todo a aquellos que tienen una responsabilidad política en cualquier ámbito administrativo, político y judicial, a asumir un compromiso de una mayor moralidad, así como de un sentido de justicia y legalidad». EFE