POR ODALIS MEJIA
El reverendo Manuel Rivera de las iglesias Asamblea de Dios rechazó que el cardenal Nicolás de Jesús López Rodríguez exprese que el pueblo dominicano no tiene que pedir perdón por la matanza de haitianos de 1937 porque el perdón es el corazón del cristianismo, y un mandato de la palabra de Dios y los que siguen a Jesucristo tienen que tenerlo como su bandera.
Rivera señaló que reiterar el perdón no es un pecado, es una acción cristiana, por lo que rechazar la actitud del obispo de Mao Diómedes Espinal, es un contra sentido de una persona que tenga la vida del cristianismo.
López Rodríguez declaró que el pueblo dominicano no tiene que pedir perdón por la matanza de haitianos porque el responsable de la masacre fue Trujillo y ya está enterrado.
Al respecto Rivera consideró que habría que decir lo mismo del perdón que pidió el Papa por lo que pasó en la Inquisición. Pidió perdón y no fueron ninguna de las personas que estén lejanamente vivas, dijo.
Señaló que el obispo de Mao habló en nombre del pueblo dominicano que es eminentemente cristiano y pedir perdón no tiene nada malo, por lo que no hay nada que reprocharle al sacerdote.
MEMORIAS
El Diálogo Dominico-Haitiano de las Iglesias Evangélicas presentó ayer sus memorias de acciones del 2006 entre la que destaca la definición de políticas que reduzcan las confrontaciones, estimulen la colaboración y la cooperación que normalicen el tránsito migratorio.
El director ejecutivo del organismo, Lorenzo Mota King, declaró que la Comisión Dominicana del Diálogo, en coordinación con esa misma institución en Haití, han ejecutado planes concretos que representan una mayor ocupación tanto para las instancias sociales, como para la sociedad civil para fortalecer los lazos de amistad y buena voluntad entre ambas naciones.
En tal sentido, informó que se han motorizado acciones dirigidas a los centros del poder político en las que trabajan mancomunadamente políticos, grupos feministas, pastores, jóvenes, sacerdotes, legisladores, empresarios, militares, con el objetivo de generar acciones a favor del mejor entendimiento de esas naciones hermanas.
Nuestra propuesta abarca un promedio de 84 organizaciones políticas, religiosas, laicas, voluntarias y civiles que se expresan en las áreas educativas, sanitarias y los organismos estatales en la República Dominicana y 102 en Haití, dijo.
Agregó además que coopera con nueve proyectos para asistencia y promoción en medio de las áreas de medio ambiente, participación y representación democrática, iniciativas democráticas, proyectos educativos pro democracia y la promoción de la niñez y la juventud.
Dijo que la iglesia ha buscado contribuir para que sectores de ambas naciones puedan encontrarse, conversar y buscar soluciones adecuadas a sus problemas. Afirmó que fruto del diálogo se logró que ambos gobierno crearan una comisión mixta de medio ambiente.
Mota King considera que la voluntad entre ambas naciones para llegar a entendimientos ha crecido y lo que había faltado era la acción para motorizar esa voluntad de la cual la iglesia ha funcionado como catalizadora.
Este impulso que hemos dado ha sido como paso de mucha trascendencia para el buen desarrollo de la región, expresó Mota King, al hablar en rueda de prensa junto a los pastores Manuel Rivera, Juan Alberto Díaz, Manuel Estrella y Telésforo Isaac.