a Organización de Países Productores de Petróleo (OPEP) y Rusia prevén que el mercado global de hidrocarburos tenga mayor balance, archivo
NUEVA YORK. El precio del petróleo abrió en fuerte baja el lunes en Nueva York debilitado por las inquietudes sobre el desequilibrio entre oferta y demanda atizadas por el referendum griego y las negociaciones sobre el programa nuclear iraní.
Hacia las 13H20 GMT el barril de light sweet crude para entrega en agosto cedía 2,41 dólares a 54,52 dólares en el New York Mercantile Exchange (Nymex), después de un fin de semana de tres días por el feriado nacional y un retroceso el jueves a 56,93 dólares en el New York Mercantile Exchange.
Con estas variaciones, el WTI recuperaba los valores que tenía a mediados de abril.
«Por un lado tenemos a Grecia, que genera un sentimiento de incertidumbre, y por otro, los mercados chinos tuvieron desempeños malos últimamente, así que preocupa que la demanda de energía sea más baja de lo que habíamos anticipado», expliucó Bart Melek, de TD Securities.
Y por el lado de la demanda, el panorama no es mucho más alentador, con «la OPEP que produce muy por encima de los límites y la producción estadounidense cerca de récords», añadió, sin mencionar que los mercados prevén que las negociaciones entre Irán y las grandes potencias sobre el programa nuclear terminen en un acuerdo.
«Va a haber más petróleo iraní (en el mercado). No nos preocupamos por los seis meses por venir, pero el mercado mira más allá», dijo.
«El ‘no’ de los griegos a más medidas de austeridad y la nueva caída del mercado de acciones chino acarrea una aversión al riesgo que tiene una incidencia sobre los activos riesgosos y por ende sobre las inversiones en crudo», añadieron analistas del Commerzbank.
En paralelo, «el dólar está muy fuerte y se mantendrá como un destino atractivo» para los inversores en el período de incertidumbres actuales, destacaba Matt Smith de ClipperData: «el dólar más fuerte empuja nuevamente hacia abajo los precios del crudo hoy».
Como los intercambios se hacen con billete verde, los compradores que utilizan otras divisas quedan penalizados.