El  Pico Diego de  Ocampo espera por ti

El  Pico Diego de  Ocampo espera por ti

SANTIAGO.  Imponente, fresco y amigable es  el   Pico Diego de Ocampo,  a 15 kilómetros al norte de  esta ciudad. Te espera para brindarte toda su grandeza y mostrarte sus aportes al medio ambiente.

El viaje, para mí, fue una experiencia única. Iniciamos el recorrido desde el centro de visitantes, en la zona de Ranchito de Piché, donde también podemos adquirir souvenires, alguna picadera y agua indispensable para el viaje que dura    dos  horas.

Esta montaña tiene una importancia enorme sobre el ecosistema y para el turismo, ya que en el trayecto podemos ver árboles endémicos y desde el pico se   observan   los manaclares (especie de palma) y se disfruta de fuertes brisas en un ambiente natural.

En el año 2002 se construyó   un mirador y se preparó  un sendero que es usado habitualmente por grupos locales para su acceso al pico. Sin embargo aún se requieren facilidades e instalaciones complementarias para actividades ecoturísticas en mayor escala.

La Sociedad Ecológica del Cibao (Soeci),   ha demostrado un interés particular por la conservación de los recursos de esta área protegida y en particular por visualizar un plan que acerque a los dominicanos a conocer el Pico Diego de Ocampo.

Para eso Soeci estableció un   sendero educativo para garantizar que los visitantes tengan la orientación y el conocimiento necesario de los procesos ecológicos que se escenifican en ese ecosistema.  Este sendero tiene un recorrido de 5.5 kilómetros y once estaciones, cada una para mostrar algún aspecto resaltante de su ecosistema.

YAMIRA TAVERAS

y.taveras@hoy.com.do

El   Pico Diego de Ocampo es visitado por un promedio de 3,500 personas anualmente. Esta cantidad va en incremento, superando las 5,000 este año”, explica Olmedo León, técnico y ex presidente de la entidad.

Los visitantes son acompañados por guías que hacen las explicaciones en las estaciones y el trayecto, con excepción de los que acuden directamente  sin la carta de ruta correspondiente.

En las manaclas  existe un  centro de capacitación agroecológica  con  una capacidad para 44 personas, con todas las facilidades básicas de un recinto de esta naturaleza, y está llamado a convertirse en el creador e inspirador de una conciencia ambientalista colectiva en la región del Cibao.

Esta estructura fue construida en piedra encajonada para aprovechar los recursos locales y mostrar a los lugareños el valor de sus recursos naturales.

Consta de dormitorios, un salón de clases y audiovisuales, una cocina – comedor y   área administrativa.  Este hermoso lugar ha sido durante todo el año el escenario ideal para la realización de cursos, convivencias, campamentos y encuentros que se organizan con grupos comunitarios rurales y de la ciudad.

El Centro Agroecológico se encuentra en la finca escuela de la Sociedad Ecológica del Cibao, una porción de 104 tareas  en la que están establecidos los módulos demostrativos y las áreas educativas y de experimentación. También cuenta con un Arboretum para mostrar al visitante las especies arbóreas que son utilizadas para la rehabilitación de las áreas degradadas del vedado.

Soeci mantiene la vigilancia y el control del Pico Diego de Ocampo en coordinación con el Ministerio de Ambiente.

Más de una veintena de miembros de Grupos de Guías del Pico Diego de Ocampo,   reciben entrenamientos para ofrecer al turista un servicio personalizado. 

La Sociedad Ecológica del Cibao  se propone instruir a los grupos comunitarios locales sobre la defensa del entorno en el que conviven, a través de actividades que reporten beneficios económicos y ambientales.

Para ello se ha visualizado un plan que involucre a los jóvenes de las comunidades adyacentes en este propósito, en el entendido de que son los mejores prospectos para recibir la capacitación y entrenamiento.

Las comunidades involucradas son Ranchito, Piché, La Guazumita, Los Pomos y La Manacla), se caracterizan por el bajo nivel de ingresos de sus habitantes, con una alarmante tasa de desempleo y falta de oportunidades que impulsa los jóvenes a emigrar a la ciudad, la viabilización de un proyecto con estas características garantiza más de una veintena de empleos directos y jornadas continuas de formación educacional, todo ello en torno al esfuerzo continuo por la preservación del Área Protegida Diego de Ocampo.

Para subir.     La subida a pie o en mula desde Villa González también merece la pena. Es un rincón poco conocido en la provincia de Santiago.

Zoom

Marco legal

Inicialmente, el área de Diego de Ocampo y sus alrededores fue declarada zona vedada mediante la Ley 5697 del 8 de diciembre del 1961. Luego, mediante el decreto 233 del 30 de julio del 1996 fue declarado  Reserva Biológica. Dicho decreto fue ratificado luego por la Ley General de Medio Ambiente y Recursos Naturales, la  número  64 del 18 de agosto del 2000.

Publicaciones Relacionadas

Más leídas