El poder de las encuestas

El poder de las encuestas

Glenn Davis

En las últimas semanas, la población de la República Dominicana ha recibido los resultados de varias encuestas sobre el panorama político que vive el país en los actuales momentos, todas realizadas por firmas reconocidas en el mercado y otras que a pesar de llevar un buen tiempo operando, se han mantenido en el anonimato. Los resultados han generado una ola de comentarios a favor y en contra, como era de esperarse

Siempre será así, los resultados de una encuesta serán visto “a sigún”, según convenga a los intereses de cada quien. Pero donde radica la preocupación de este humilde servidor, está, en las descalificaciones en la que incurren personas contra estas firmas cuando los resultados no son favorables al sector o proyecto político el cual representan.

Desde que existen las encuestas, se conocen como instrumentos de trabajo, no solo para la actividad política, en el sector empresarial es bastante utilizada también, y hasta el sector gubernamental hace sus estudios para evaluar el desempeño de las instituciones públicas y su gestión en sentido general. Sin embargo, hay quienes se dedican a la tarea de empañar el trabajo profesional que realizan  la mayoría de estas empresas.

No obstante, siendo justo, tenemos que reconocer, que dentro del amplio listado de encuestadoras locales e internacionales, que han trabajado en la República Dominicana se han encontrado algunas que no necesariamente actúan apegados a los principios éticos profesionales requeridos para la realización de estos estudios científicos, lo cual termina desprestigiando su marca y descartándola para futuras contrataciones.

Las encuestas no se hacen solas, alguien las paga y ese alguien tiene un interés con la misma, sea cual sea su área. No todas se publican, porque su publicación dependerá de los resultados y lo que la parte interesada quiera dar a conocer de la misma. Es por ello, que nunca se conoce el cuestionario utilizado para obtener la información que resulte de la encuesta. Quien paga determina si se publica y qué se publica.

De las encuestas surgen las estrategias o planes de trabajos y de campañas, así como pueden surgir proyectos, negocios y un sin número de elementos. El gran peligro al que estamos expuestos con ellas es, indudablemente, la manipulación con que son manejadas a la hora de convencer o persuadir a los ciudadanos. Hoy por hoy, el descrédito de las encuestas y sus firmas son provocados principalmente por quienes la utilizan, por aquellos que pagan por ellas.

En lo adelante seguiremos viendo muchas encuestas. También vamos a leer y escuchar las mismas opiniones y descalificaciones de los actores políticos en los medios de comunicación, tratando de convencer a la población de que las encuestas que cada uno maneja es la que habla la verdad. Sea usted el jurado.

En fin las encuestas tienen ese poder que pocos ven, pero que existe, y los contratantes lo saben, tanto así, que los primeros convencidos son ellos.