Marie de León, una joven amante de los perros, rentó un apartamento; como es natural, cumplió con todos los requisitos propios de un contrato de arrendamiento de vivienda: depósitos, dos más uno; contrato de energía eléctrica, agua, teléfono… Al tener el contrato de alquiler en sus manos, lo leyó y se dio cuenta de que no tenía ninguna cláusula que prohibiera la tenencia de perros.
Muy entusiasmada, procedió a la mudanza, y, antes del mes, ¡oh, sorpresa!, el propietario, al darse cuenta de que tenía perro, dijo: ¡Ayyy, tenemos un problema, yo no quiero saber de perros, el perro no es gente para estar dentro de uno. No, no, no!. Sin embargo, el contrato no lo especificaba.
¿Odio a los perros? Así como hay personas que odian a determinadas razas de personas, por color o procedencia, etc, lo cual entra en la categoría de fobia, así también hay quienes no soportan a los perros.
¿Por qué?, pues, quizás por un asunto cultural. Recordemos que tiempo atrás no era tan generaliza la tenencia perros como mascota, pero también podría ser por una mala experiencia. La fobia puede ser social o cultural.
La opinión de dos especialistas. Según Kaly Báez, psicóloga Clínica y Master Intervención en la Ansiedad y el Estrés del Centro Vida y Familia Ana Simó, el odio a los perros es la expresión de un temor persistente, anormal e injustificado hacia este animal.
La especialista de la conducta indica que esto generalmente ocurre porque ha sido alimentado por una consecuencia directa en el contacto o trato con los animales.
Si uno es agresivo con ellos, ellos reaccionarán de la misma manera. Existen personas que desarrollan este temor extremo, reflejado como odio, por experiencias que les han causado algún tipo de trauma, y por lo regular eso se lo transmiten también a sus más allegados, logrando que ellos también reaccionen agresivamente ante la presencia de un perro.
Este rechazo tiene que ver con cómo percibimos a los perros cultural y socialmente, porque hay que tener en cuenta que, lamentablemente, hasta hace muy poco maltratar a los perros no tenía ninguna consecuencia, por lo que la conducta se veía reforzada. Sin embargo, Sin embargo, actualmente esta conducta ha cambiado y la conciencia sobre el buen trato a esto animales es mucho mayor.
De su lado el médico veterinario Eduardo Pichardo, del Centro Veterinario Arroyo Hondo, explica que el rechazo de parte de los seres humanos hacia los animales ocurre por la falta de costumbre de las personas de convivir con mascota.
Generalmente esto sucede con personas que no crecieron con mascotas a su alrededor, o bien atravesaron por un proceso traumático de agresión de parte de una mascota en su niñez, manifiesta éste especialista.
Las frases
Kaly Báez
Como sociedad hoy día estamos logrando valorar la presencia de un perro en el hogar, y, los que no comparten tenerlos en casa, los respetan.
Eduardo Pichardo
El rechazo a los perros, cualquiera que sea la razón, tiene solución, no es tan difícil de superar, con ayuda y tratamiento, se logra.