El PRD frente a su mayor desafío

El PRD frente a su mayor desafío

POR JUAN BOLÍVAR DÍAZ
El Partido Revolucionario Dominicano (PRD) se aboca a uno de sus mayores desafíos en su ya larga historia de más de seis décadas: renovar sus dirigentes a nivel nacional y optar definitivamente por el camino de la institucionalidad democrática ahora sin el fuerte liderazgo unificador que lo sostuvo hasta hace 7 años.

Superando dificultades, el Comité Ejecutivo Nacional perredeísta se aboca este lunes a fijar la fecha definitiva para la Vigésimo Segunda Convención Ordinaria a celebrarse el próximo mes de mayo. Fuentes bien informadas adelantan que se propone el domingo primero de mayo, por ser el Día de los Trabajadores.

Pero todavía quedan algunas dudas sobre el padrón de militantes que se ha ido conformando en un proceso de reestructuración de los comités de base ahora vinculados a los colegios electorales, ya que no faltan quienes consideran que una buena proporción de los perredeístas no han renovado su inscripción.

LARGO PROCESO ORGANIZATIVO

Como ha ocurrido siempre en sus 66 años de historia, este proceso para celebrar la Vigésimo Segunda Convención Ordinaria ha sido largo y lleno de dificultades, que han tenido que ser sorteadas por una comisión organizadora bajo la presidencia de la doctora Milagros Ortiz Bosch.

El proceso de renovación de la dirección partidaria fue lanzado casi desde el mismo momento en que salieron del poder, el 16 de agosto pasado. Fue precedido por una convención extraordinaria que renovó los estatutos el 28 de noviembre pasado, justamente para instituir el voto universal y secreto de los militantes para elegir los dirigentes de todos sus organismos.

Entre otras reformas se estableció la organización de los comités de base en torno a los colegios electorales, lo que está llamado a reducir el amiguismo y el clientelismo, ya que en adelante los perredeístas sólo podrán militar en el organismo correspondiente a su colegio electoral. Hasta ahora los aspirantes a cargos directivos y a postulaciones organizaban comités de base propios reuniendo una cantidad mínima de personas, independientemente del lugar de residencia.

En principio se señaló el mes de marzo para celebrar la convención ordinaria y luego se dijo que sería en abril. Pero el proceso de reorganización de los comités de base y de elaboración del nuevo padrón no fue concluido a tiempo. Se ha prolongado hasta el 17 de abril el plazo para que los militantes se inscriban en el comité correspondiente al colegio electoral en que votan.

La doctora Ortiz Bosch dice con satisfacción que han establecido 149 centros de cómputos municipales y han instruido a diez mil militantes para dirigir la votación universal de sus miembros, que incluirá cuatro boletas para los dirigentes nacionales, provinciales-municipales, zonales y de base.

El proceso no ha conllevado fuertes enfrentamientos entre los perredeístas, aunque recientemente cuatro candidatos a la secretaría general objetaron que el ingeniero José Delio Ares dirigiera el cómputo nacional de la convención, por haber sido funcionario subordinado de Orlando Jorge Mera, candidato al mismo cargo, cuando fueron los dos principales ejecutivos del Instituto Nacional de las Telecomunicaciones, durante el pasado gobierno perredeista.

La objeción habría sido levantada esta semana durante una reunión de la comisión organizadora y el presidium perredeísta con los candidatos a los principales cargos partidistas. Ares es un reputado profesional de informática que ha dirigido el centro de cómputos del partido blanco en varios procesos electorales nacionales y ha sido delegado técnico del mismo ante la Junta Central Electoral.

Todavía esta última semana la Comisión Política no logró ponerse de acuerdo sobre la fecha en que deberá celebrarse la convención eleccionaria. Pero se espera que en la reunión del Comité Ejecutivo Nacional convocada para el lunes 4 de abril se acuerde para el 1 de mayo próximo u otro domingo del mismo mes.

RENOVACIÓN O DECADENCIA

¿Revivirá o sepultará al PRD la convención ordinaria? Con ese título publicó un artículo en HOY el martes 29 de marzo el doctor Jesús Feris Iglesias, quien tras ponderar los aportes de su partido al proceso democrático nacional desde su fundación en 1939, consideró urgente una renovación para que pueda retomar el papel que le corresponde en la sociedad dominicana, resaltando la responsabilidad de los militantes a la hora de escoger sus dirigentes.

Los candidatos a la presidencia del PRD Virgilio Bello Rosa y Enmanuel Esquea Guerrero, al igual que Alejandro Abréu, Amaury Justo Duarte y Orlando Jorge Mera, aspirantes a la secretaría general, han insistido en proclamar la urgencia de una renovación partidaria para retomar los compromisos programáticos de la socialdemocracia. Bello Rosa llegó a proclamar que el PRD tendrá que renovarse y espantar los fantasmas de la corrupción y el grupismo, o estará condenado a la desaparición.

Muchos otros dirigentes del PRD, como Milagros Ortiz Bosch, Hugo Tolentino, e Ivelisse Prats, han criticado consistentemente los pragmatismos que adoptó el PRD a su paso por el poder, y el incremento del grupismo y el clientelismo, considerando que socavan la institucionalidad partidaria.

Poco antes de la reforma estatutaria, la comisión organizadora de la convención auspició una amplia consulta a los militantes. El 52 por ciento de los 40 mil 629 que respondieron el cuestionario criticaron el papel de sus dirigentes, considerando que no habían mantenido en alto los principios, valores e intereses del partido.

El 45 por ciento de los consultados consideró necesario que se produzcan cambios en la dirección del partido. El 54 por ciento pidió superar la precaria democracia interna y un 73 por ciento consideró la modernización entre las principales prioridades del PRD.

Tras su última gestión de gobierno, el PRD perdió la predominancia que había tenido desde su llegada al país en 1961, y especialmente desde 1991, cayendo al 30.6 por ciento de la votación, además del 3 por ciento que le sumaron 5 partidos aliados.

Una encuesta del Centro de Investigaciones y Estudios Sociales efectuada a principios de este mes le da al PRD apenas un 10 por ciento en las simpatías del electorado, el nivel más bajo de su historia.

Entre analistas políticos se estima que el partido blanco ha caído al mayor descrédito de su historia, con el agravante de que en su actual crisis no cuenta con el liderazgo unificador de los desaparecidos Juan Bosch o José Francisco Peña Gómez, cuyos carismas y discursos programáticos lo rescataron varias veces de situaciones críticas.

Sometidos a interminables denuncias de tráfico, clientelismo y corrupción, la dirección perredeísta responsable de la gestión gubernamental 2000-04 no ha hecho la mínima autocrítica ni reconocimiento de errores y el grupo del expresidente Hipólito Mejía trata de mantener la hegemonía en el PRD como si nada hubiese ocurrido.

SOBRAN CANDIDATOS

Cerrada la inscripción de candidaturas desde el 4 de marzo, parece que hay un exceso de aspirantes a los principales cargos directivos. Para la presidencia del partido compiten Enmanuel Esquea, Virgilio Bello Rosa, Ramón Alburquerque, Tony Raful, Rafael Abinader y Eugenio Taveras.

Para la secretaría general son candidatos Orlando Jorge Mera, Alejandro Abréu, Guido Gómez Mazara, Rafael Díaz Filpo, Amaury Justo Duarte, Almanzor González Canahuate, Miguel Severino y Aníbal Belliard.

Aníbal Duvergé, Juan Santos, Deligne Asención, Darío Castillo y Geanilda Vásquez optan por la secretaría de organización, y varias decenas se inscribieron para competir por las 21 vicepresidencias y las vicesecretarías generales.

En los niveles provincial, municipal, zonal y de base también serán electos los respectivos presidentes, vicepresidentes, secretarios generales, subsecretarios y de organización.

Para los puestos claves de presidente y secretario general hay candidatos que garantizarían una renovación del PRD. Tales los casos de Bello Rosa y Esquea, y de Abréu, Justo Duarte, y Jorge Mera.

Entre dirigentes perredeístas existe la convicción de que la presidencia se disputa entre Alburquerque, Esquea y Bello Rosa. Al primero se le atribuye, además de una gran formación general y extraordinaria capacidad expositiva, grandes habilidades para amarrar, especialmente entre sus colegas senadores, muchos de los cuales le promueven bajo el compromiso de ser favorecidos con repostulaciones.

Los abogados Bello Rosa y Esquea compiten por el segmento más preocupado por la renovación del PRD, ambos disfrutan de prestigio más allá de las fronteras partidarias. De mantenerse las dos candidaturas podrían facilitar el triunfo de Alburquerque. Su éxito dependerá también de que puedan movilizar al voto a la mayoría perredeista no comprometida con las luchas grupales.

Aunque se advierten fisuras en los principales grupos en torno a las diversas candidaturas, recientemente el que encabeza Rafael Suberví Bonilla ha tratado de unificarse, mientras algunos exploraban la posibilidad de cambiar el sistema unipersonal de las nominaciones por planillas o planchas de candidatos, lo que alentaría el grupismo.

Para la secretaría general la competencia estaría centrada entre Orlando Jorge y Guido Gómez, seguidos por Díaz Filpo y Amaury Justo. Jorge Mera se estaría fortaleciendo por el rechazo que en algunos sectores genera la candidatura de Gómez Mazara, señalado como uno de los “muchachos terribles” del grupo y el gobierno de Hipólito Mejía.

El desafío del PRD pasa todavía por la capacidad de llegar a la convención sin mayores dilaciones ni enfrentamientos que sigan erosionando su crédito público, con un padrón aceptado por todos los sectores, porque sus resultados no generen nuevas divisiones, y finalmente que impliquen un grado considerable de renovación.-

 

 

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