El PRD prefirió agudizar contradicciones antes que conciliar

El PRD prefirió agudizar contradicciones antes que conciliar

Preocupados por  los  conflictos en el PRD, muchos de sus dirigentes han analizado  profundamente las causas que los provocan, así como las posibles soluciones; sin embargo, algunos de los más conocedores de ese gran partido, en vez de optimismo destilan desesperanzas, ya que entienden que hay quienes prefieren que los conflictos se agudicen al extremo de provocar cualquier salida incluyendo expulsiones o separación, partiendo de  que solo cuando se hayan  separado  y  sus  aguas se desborden, será posible reencauzarlas nuevamente.

Otros entienden que  la mayoría  perredeísta, aún  se encuentren en posiciones diferenciadas,  sueñan con la posibilidad  de un entendimiento y en la unificación de su partido. Esperan que la magia se dé, que aparezca una varita milagrosa o que surjan fórmulas capaces de lograr que los máximos exponentes de las dos tendencias más conocidas se puedan sentar en una mesa de diálogo.

Los que sustentan la tesis de la agudización de las contradicciones hasta el punto de la expulsión o separación entienden  que ésta puede ser la salida más viable y conveniente y tal vez la más fácil, ya que   obviaría la dificultad de entendimientos, que  ha sido y es el gran problema, porque en realidad se trata de  que no han podido lograr  puntos de convergencia.

Igualmente parten de la premisa de que con razones o sin ellas, la confianza se ha perdido, y si no han logrado fórmulas capaces de recobrarla mediante conciliación o Actos de Contrición, cuyo origen es eminentemente espiritual y de contenido humanista cristiano  para que se olviden agravios y no se vuelva a hablar de ellos, se impondría la dialéctica materialista  de las contradicciones y sus consecuencias.

Es probable que algunos de esos dirigentes, lógicamente más  conocedores que nosotros sobre la situación de su partido entiendan que la agudización de las contradicciones, expulsando o separando es la vía más fácil; sin embargo, aunque no quieran o no les guste que les aconsejen con  expresiones bíblicas o cristianas porque no son un partido confesional, como  se supone que son   compañeros, amigos y hermanos entre sí, quiero recordarles solamente dos:

Mateo 40:18:15 “Por tanto, si tu hermano peca contra ti, ve, amonéstalo a solas entre tu y él. Si él te escucha, has ganado a tu hermano. Pero si no te escucha, toma aún contigo uno o dos, para que todo asunto conste según la boca de dos o tres testigos. Y si él no les hace caso a ellos, dilo a la iglesia; y si no hace caso a la iglesia, tenlo por gentil y publicano”.

1 Juan. 4:20 “Si alguno dice: Yo amo a Dios, y aborrece a su hermano, es un mentiroso; porque el que no ama a su hermano, a quien ha visto, no puede amar a Dios a quien no ha visto”.

Como esos dos recordatorios  son   Palabra de Dios, ojalá les  ayuden a reflexionar a tiempo, porque “toda casa dividida contra sí misma no se mantendrá en pie”.

 

Publicaciones Relacionadas

Más leídas