POR  JUAN M. RAMIREZ
El Partido Revolucionario Dominicano (PRD) advirtió ayer al gobierno sobre las consecuencias de aplicar nuevos impuestos a los combustibles, vehículos de motor, la propiedad inmobiliaria y a los productos de la canasta familiar.

Asimismo, sugirió mantener el presupuesto ejecutado en  el 2005, a fin de que ahorre los recursos que necesita para cubrir el déficit cuasifiscal, alegadamente creado por el exceso de gastos de este año.

En rueda de prensa, la comisión económica del PRD exhortó a la gestión que encabeza el presidente Leonel Fernández a observar los datos que refleja la encuesta GALLUP-HOY, donde el 72% de los dominicanos califica de mala y muy mala la situación económica del país.

Rechazó que el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) se rompa si el gobierno aplica la nueva reforma fiscal que tiene en carpeta, ya que sólo basta con que las autoridades se ajusten a los ingresos, lo que se consigue con una adecuada disciplina en el gasto.

Arturo Martínez Moya, presidente de la comisión, definió como explosiva la situación si el gobierno agrega más cargas impositivas como pretende en el proyecto de reforma fiscal que enviará al Congreso en las próximas horas.

Dijo que el gobierno ha preparado un proyecto de ley que ampliará la base del ITBIS, con la finalidad de incluir productos de la canasta básica que hasta la fecha estaban exentos, tales como aceite, azúcar, mantequilla, yogur, salsa de tomate y otros.

Martínez Moya, quien estuvo acompañado de Rosanna Oviedo y Wendy Capellán, miembros de la comisión, denunció que el gobierno insiste en gravar con nuevos impuestos a los servicios de seguros, el consumo de bebidas alcohólicas, así como la gasolina, el gasoil, las propiedades inmobiliarias y vehículos de motor. 

Consideró que basta ya con las reformas tributarias anteriores mediante las cuales, sostuvo,  la gestión peledeista le ha sacado a la población más de RD$56,000 millones para derrocharlos de manera irresponsable y sin dar solución a los principales problemas del país.

“Es bueno que se sepa que el gasto público experimentó en el año 2006 el salto más elevado que se haya registrado en la historia del Presupuesto Nacional, con aumentos desproporcionados en todas las partidas presupuestarias”, sostuvo Martínez Moya.

Señaló que según las proyecciones del Banco Central, la economía dominicana tendrá un crecimiento nominal de aproximadamente  un 17% lo que provocaría un crecimiento en los ingresos públicos que pasarían de RD$179,000 millones a RD$209,000 millones.

Precisó que esos ingresos serían superiores a los que generaría la nueva reforma tributaria, lo que significa que no es necesario gravar con más impuestos a la población.

“Si este incremento natural en los ingresos se combina con un mantenimiento del gasto en el nivel del año 2006 –que de por sí ha sido excesivamente alto- al gobierno le quedaría un excedente de RD$21,400 millones sin tomarse la molestia de reducir sus abultados gastos en publicidad, viajes, viáticos y nóminas, entre otras partidas beneficiadas por el derroche”, enfatizó.